BARRANQUILLA.— Organizar unos juegos deportivos múltiples es todo un reto para cada nación. La logística que ello conlleva vincula muchos factores: transporte, alimentación, instalaciones, alojamiento, transmisiones radiales y televisivas, salas de prensa, entre otras cuestiones.
Acaso muchas de estas cosas no fueran posibles si este tipo de evento no contara con una ayuda inestimable y muchas veces invisible: la de los voluntarios. En estos 23ros. Juegos Centroamericanos y del Caribe, por ejemplo, hay unos cinco mil.
Elianys es una voluntaria que, durante todo el evento, estará en la villa de los atletas. Estudiante de licenciatura en Turismo, la joven confesó a este reportero que para ella es un honor ayudar en todo lo que pueda.
Su labor es estar presente en las ceremonias de protocolo que se efectúen en la Villa durante los Juegos. «Imagine el privilegio que representa estar cerca de estos campeones, y verlos orgullosos en cada izada de sus banderas», comentó el día en que nuestra enseña nacional se levantó en la villa, hace ya unas cuantas jornadas.
El Comité Organizador de Barranquilla 2018 lanzó una convocatoria para el voluntariado de los Juegos y rápidamente obtuvo una positiva respuesta. Muchos querían enrolarse. Como requisito, los voluntarios debían ser mayores de 16 años.
Previo al inicio de las justas, la Alcaldía local impartió capacitaciones a estos jóvenes en cuestiones como civilidad turística, protocolos de acción y organización.
Los resultados son palpables: los voluntarios ayudan en todo, especialmente a los equipos de prensa que tantas preguntas tienen y siempre andan apurados de una instalación a otra.
Como dato curioso, entre los centros que más voluntarios aportaron a estos Juegos se encuentra la Universidad del Atlántico —recinto que también acoge disciplinas como las pesas—, con 1 200, quienes son estudiantes de especialidades como licenciatura en Cultura Física, Recreación y Deportes, Idiomas extranjeros, Nutrición y dietética, Técnica en Operación turística, Tecnología en Gestión turística y Administración de empresas turísticas.
«Para mí es una distinción ser voluntario. Yo también soy protagonista de estos Juegos, porque aporto y colaboro en todo lo que puedo», dijo Miguel, uno de los que coordina el transporte de la prensa.
Colaborar es una de las palabras más usadas por los voluntarios. «Caballero, me colabora con sus datos», «¿podrían colaborarnos los periodistas que se van hacia la instalación de tiro?», son estas algunas de las frases que a diario emplean los amables voluntarios, héroes invisibles en la concreción de que Barranquilla 2018 sea una fiesta deportiva exitosa.
Visite nuestroespecial multimedia de los 23eros Juegos Centroamericanos y del Caribe Barranquilla 2018.