La comunidad La Belén, en Camagüey, exhibió sus proyectos culturales. Autor: Orlando Durán Hernández Publicado: 21/09/2017 | 06:32 pm
CAMAGÜEY.— No son pocos los jóvenes que prefieren el deporte, escuchar y bailar la música preferida, ver televisión, realizar excursiones o acudir al cine, la playa, el campismo o los museos… para recrearse.
¿Cómo puede pasarla bien la familia cubana? ¿Qué hacer para que las diversas festividades, además de entretener, sean un escenario que permita cultivar valores en un ambiente sano?
Movidos por tales preguntas, los habitantes de la comunidad agramontina La Belén participaron en la audiencia pública parlamentaria La recreación, una opción para la familia, realizada por la Comisión de Atención a la Niñez, la Juventud y la Igualdad de Derechos de la Mujer, de la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP), y a la que asistieron pioneros, noveles artistas de la Asociación Hermanos Saíz (AHS) y estudiantes de la Universidad de Ciencias Médicas Carlos J. Finlay.
En el intercambio, que tuvo lugar en la escuela primaria Enrique Zaragocí Miranda, el Doctor en Ciencias Rodolfo Marrero Acosta, profesor de la Universidad de Camagüey Ignacio Agramonte y Loynaz, explicó que la recreación, por sí sola, es un concepto que abarca el desarrollo de actividades placenteras y voluntarias, las que implican un goce físico y espiritual.
Sin embargo, expresó, esta concepción se transforma al incorporársele elementos del saber. «Cuando se aspira a una recreación sana y culta se establecen nuevas dimensiones, entre las que prima la cultura como un elemento superior», subrayó.
Los jóvenes Lilisbeth Echemendía Lozano y Yordanis Viamontes Beltrán, ambos estudiantes de la Universidad médica agramontina, comentaron sobre sus experiencias durante sus visitas a La Belén, como integrantes de proyectos socioculturales y comunitarios de la FEU.
«Los vecinos agradecen nuestra presencia», dijo la muchacha; y Viamontes comentó: «No solo brindamos servicios de salud, sino que también identificamos problemáticas higiénico-epidemiológicas para, entre todos, buscar alternativas que las mitiguen. Y eso también es una forma de apostar por la cultura sana».
Acerca del polémico tema de la recreación, el trabajador social Yulian Áreas pulsó bien profundo: «El arte, junto a la recreación, transforman al ser humano. Por eso es necesario preguntarse qué más falta por hacer, justo cuando hay personas que no simpatizan con el buen gusto».
Arelys Santana Bello, presidenta de la comisión parlamentaria, insistió en que intercambios como estos son buenos espacios para reflexionar sobre el rol de la familia, la comunidad y la escuela, y para promover una recreación sana en su medio, atemperada a la realidad. No existen, agregó, recetas prescritas que consigan este fin por sí solo, por lo que se cuenta para ello con el deseo y la voluntad de muchos, y la unidad de los factores del barrio para el bienestar de su gente.