Tanmy López Moreno, violinista, compositora y cantante. Autor: Raúl Pupo Publicado: 21/09/2017 | 05:42 pm
En La Habana, el 7 de enero de 1984, nació esta violinista, compositora y cantante. Se graduó del nivel medio-profesional en 2002 e ingresó en el Instituto Superior de Arte, donde finalizó sus estudios como licenciada en Música, en 2008. Formó parte de la Orquesta Sinfónica Juvenil de Cuba Alejo Carpentier, del quinteto Anima Ensemble, y de la Camerata Romeu, con la cual grabó los CD Sueños de ida y vuelta y La danza de las brujas; también formó parte del dúo DáDivas, de Interactivo, de Warapo, y de la orquesta La Élite.
Su huella como instrumentista ha quedado en los álbumes: De qué cantada manera, Haydeé, Cool cool filin, Bossa cubana, Sentimiento, Ammore. Boleri napoletani, Siete rayos, Breathe, Goza Pepillo, Tengo nada, 37 canciones de Noel Nicola... Fue galardonada con el Premio de Creación Ojalá 2010, convocado por los estudios Ojalá y el cantautor Silvio Rodríguez, del que resultó el disco La luz es música (Premio Cubadisco 2012 en la categoría Cancionística). En 2012 Bis Music entregó su Tanmy. Niña traviesa. En la actualidad actúa junto a su grupo Pura Cepa.
Letra de la canción
Coro: La niña bonita, traviesa, sin riendas,/ cubana de pura cepa./ La niña bonita, traviesa, sin riendas,/ cubana de pura cepa.
Andaba perdida por montes y mares,/ desvanecida entre necedades,/ como hojarasca al viento,/ derrochaba el sentimiento,/ mi niña cubana.
Encontrando desaciertos/ sin comprender qué pasaba,/ siempre creyendo/ en los cuentos del más allá,/ sin pensar que el tiempo/ no se detendrá jamás, mi niña,/ no se detendrá.
Cuántos enredos que ciegan lo bueno/ que lleva en su pecho/ y lo esconde con miedos,/ sin ver que su juego/ lastima lo eterno,/ le aleja su sueño,/ que es todo el empeño,/ que es más de una vida/ y si no lo termina,/ simplemente morirá,/ ¡ay! no.
Se repite coro.
Pero algo estremeció a mi niña,/ un huracán de convicciones y pasión,/ combinado con amor de la familia,/ los amigos/ y el poder de esta canción.
Y viviendo esta naturaleza/ de haber nacido/ en tiempo de revolución,/ de ver las artes como un diamante,/ el más gigante motor impulsor.
Pero, si hay un tropiezo,/ que sirva de ejemplo/ para que el camino/ no sea tan denso,/ que siga la estrella/ que lleva a la meta./ Que abra su brecha,/ que estudie al poeta,/ que sienta la magia,/ que nunca permita que nadie/ destruya su ilusión,/ ¡ay! no.
Se repite coro.