Don Quijote de la Mancha y Sancho Panza. Autor: LAZ Publicado: 21/09/2017 | 05:19 pm
En vez de: «Haz las tareas en tiempo y forma», di: «Haz las tareas a tiempo y en forma».
Un lector critica el uso del idioma inglés en el deporte. Al «corner» debe llamársele saque de esquina o puntapié de esquina, dice. El «off side» fue sustituido por fuera de juego. Él recuerda que en el Mundial de fútbol en México, en el 86, los periodistas de habla hispana se reunieron para traducir a nuestra lengua los distintos vocablos y expresiones que se utilizaban.
En el Diccionario Panhispánico de Dudas, del 2005, aparece registrado córner, con tilde, y explica que es voz tomada del inglés. El plural en español es córneres. Aclara que para designar el saque, es más recomendable saque de esquina en España, y tiro de esquina en América.
En griego, la terminación -ida quiere decir: hijo de. Atridas eran los hijos de Atreo, especialmente Agamenón y Menelao. Atreo, rey de Micenas, fue famoso según las leyendas por el odio que tenía a su hermano Tiestes, y por la venganza que ejerció contra él.
Me pregunta un lector qué significa: «Ha corrido la Ceca y la Meca». «De Ceca en Meca» y «De la Ceca a la Meca» son locuciones figuradas y familiares: De una parte a otra, de aquí para allá. Ceca, del árabe sikka, cuño o troquel de moneda, lugar donde se acuña, es la casa donde se labra moneda. En Marruecos, moneda, y en Argentina, cruz, reverso de la moneda. Ceca es nombre propio femenino. Meca, del árabe Makka, nombre propio de la famosa ciudad de Arabia Saudí, cuna de Mahoma, primera ciudad santa del Islam. La peregrinación a la Meca, una vez en la vida, es obligatoria para todos los musulmanes que dispongan de medios. Aparecen otras acepciones de la palabra meca.
La abuelita de un remitente dice: «¡Qué engüeramiento tiene esa gallina!», cuando la ve obsesionada por hacer el nido para poner sus huevos. Aunque no aceptada, parece venir —como piensa quien me escribe— de la palabra güero, procedente del castellano dialectal gorar (empollar, incubar). Algo así como: «¡Qué deseos de empollar tiene esa gallina!».