Expertos del Archivo del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba exponen en Isla de la Juventud, documentos originales de la ratificación del Tratado Hay- Quesada. Autor: Yoan Pérez González Publicado: 13/03/2025 | 10:35 pm
NUEVA GERONA, Isla de La Juventud. — El 13 de marzo de 2025 no solo marca el centenario de un acontecimiento crucial en la historia de Isla de la Juventud, un territorio que, tras 21 años de intensa lucha, regresó a la soberanía cubana gracias a la ratificación del Tratado Hay-Quesada.
La exposición de documentos originales en el Cine-teatro Caribe, presentada por especialistas del archivo del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba, no solo se suma a esta celebración centenaria, sino que también actúa como un recordatorio del valor de la memoria histórica y la identidad cubana.
El Tratado de 1904, firmado por Gonzalo de Quesada y Aróstegui en representación de Cuba y John Hay, secretario de Estado de Estados Unidos, simboliza un proceso que se extendió durante 21 años antes de su ratificación. Este largo camino pone de relieve las complejidades en las relaciones entre ambas naciones y resalta la tenacidad de los cubanos en la defensa de su soberanía.
En este contexto, la historia se convierte en un hilo conductor que nos une y nos recuerda que la independencia no es un regalo, sino una conquista. La exposición de documentos originales incluye no solo el tratado, sino también correspondencias significativas entre figuras clave como Tomás Estrada Palma y Gonzalo de Quesada, quienes jugaron roles fundamentales en la gestión del acuerdo.
Estos documentos son testigos silenciosos de una época en la que las decisiones políticas se tomaban a través de cartas, un medio que hoy puede parecer casi arcaico en comparación con la instantaneidad de la comunicación moderna. Sin embargo, su relevancia persiste, recordándonos que cada palabra escrita llevaba consigo el peso de una nación entera.
Uno de los momentos más emotivos del evento fue el cablegrama que informó sobre la ratificación del tratado al gobierno de Alfredo Zayas, que junto con otros mensajes que comunicaron la noticia al ayuntamiento de Isla de Pinos, encapsula el júbilo y el alivio de una población que anhelaba su reincorporación a Cuba, una condición que nunca se perdió en el espíritu de los cubanos.
Foto: Yoan Pérez González
La historia no se narra únicamente a través de fechas y tratados, sino también a través de las emociones y vivencias de quienes vivieron esos momentos. Esta realidad se evidenció en las personas que acudieron al lobby del cine Caribe, donde pudieron observar y aprender de los especialistas presentes.
Las actividades programadas para este centenario reflejan el espíritu identitario que caracteriza a los residentes de Isla de la Juventud. Se restauró el asta de la bandera, se erigió un busto de José Martí y se colocó una placa homenaje a Cosme de Torriente Peraza, reafirmando así los valores patrios y el compromiso con la identidad nacional.
Estos gestos son esenciales en tiempos donde la historia puede ser reinterpretada o incluso olvidada. Especialmente en este Municipio Especial, es un momento propicio para celebrar la historia local, así como la cultura y la identidad como parte integral de Cuba.