En Cuba se pudo detener el aumento de la curva epidemiológica de la COVID-19 y desarrollar vacunas propias para proteger a la población de esa enfermedad, no solo por la estrategia gubernamental trazada desde inicios de marzo de 2020, sino por las décadas de inversión en la industria biotecnológica y farmacéutica.
Así reflexionó el doctor Eduardo Martínez Díaz, presidente del Grupo BioCubaFarma, ante más de 200 delegados cubanos y extranjeros de 51 países que participan en Bio Habana 2022, evento enfocado en la ciencia para una vida saludable.
En la ceremonia inaugural en el Palacio de las Convenciones, a la que asistió el Primer Secretario del Comité Central del Partido y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, el titular de BioCubaFarma reseñó los éxitos del complejo biotecnológico del país, fundado en la década de los 80 por iniciativa del Comandante en Jefe, Fidel Castro Ruz.
Martínez Díaz expuso en su conferencia magistral las diferentes líneas de trabajo de la institución, que ya abarcan más allá del área sanitaria e incluyen, por ejemplo, investigaciones vinculadas con la agricultura. Además, comentó sobre las relaciones de cooperación con el exterior y la prioridad que se le concede al Programa Nacional de Medicamentos.
Un momento especial del encuentro inicial de Bio Habana 2022 fue la ovación de los participantes a los fundadores de las industrias biotecnológicas y farmacéuticas. A decir de Eduardo Martínez, es un honor contar con su presencia en el cónclave.
La creadora de la única vacuna con eficacia probada para combatir la meningitis B y C, la Doctora Concepción Campa Huergo, visiblemente emocionada, reveló a Juventud Rebelde sentirse muy alegre al constatar la materialización del sueño de Fidel y ver cómo continúa el desarrollo de la ciencia en pos del bienestar del pueblo. Además, dijo que percibe en las nuevas generaciones de investigadores el mismo compromiso de los fundadores.
En tanto, el destacado científico cubano Agustín Lage Dávila indicó que la industria biofarmacéutica de Cuba, pionera en la región y el mundo, tiene como reto permanente sortear los obstáculos del bloqueo, además de establecer alianzas con las ciencias informáticas para alcanzar mayores niveles de desarrollo.
Bio Habana 2022 sesionará hasta el próximo viernes y se centra en diez temáticas fundamentales, entre las que sobresalen la pandemia de la COVID-19, la inmunoterapia de cáncer y la industria 4.0. Además, el evento busca estrechar los nexos entre la academia y el sector empresarial, por lo que se realiza también con una feria expositiva.