El trasvase Este-Oeste continúa expandiéndose Autor: Carlos Rafael Díaz Borges Publicado: 23/12/2020 | 09:46 pm
Aunque el grueso de las obras del trasvase Este-Oeste ya ha sido ejecutado, no cesa la construcción de otras que ramifican túneles y canales desde el nororiente cubano. Sorteando pinares y terrenos rojizos aparece el área donde se erige la presa Levisa, en la que casi se mueven montañas para aprovechar al llamado Oro Azul.
La joven ingeniera industrial Dunia Santos se desenvuelve muy bien como jefa de obra. Quizás su formación universitaria le aportó más conocimientos en gestión de Recursos Humanos o Administración, pero en la Empresa Constructora de Obras Ingenieras Ecoi 16 (Castor) le vieron potencial para ponerla al frente de una tarea importante.
Cuenta Santos que la entidad constructora es la Ecoi 16, pero la proyectista es la Empresa de Investigaciones y Proyectos Hidráulicos de Holguín (Raudal), y como es un complejo hidráulico, también participa la Empresa Constructora de Obras Hidráulicas (ECOH), encargada de hacer los túneles para trasvasar el agua porque Levisa funcionará como vaso comunicante para contribuir con unos 80 millones de metros cúbicos de agua hasta la presa Mayarí.
Acá se han ejecutado, según la jefa de Obra, ocho millones de pesos desde 2019, cuando inició la construcción con acciones de la etapa de reacondicionamiento con actividades previas a la ejecución, como reparación de viales, levantamiento de facilidades temporales, conformación de plataformas, limpieza del vaso y la cortina…
«Ya avanzamos hasta la excavación del aliviadero, que usualmente se incluye en la segunda etapa; aunque aún estamos inmersos en la primera. La presa se prevé que se construya en alrededor de tres años».
Con el joven ingeniero hidráulico Anniel Álvarez intercambió también JR para saber de su labor como proyectista de Raudal en este embalse: «Aquí estamos construyendo con materiales de collera y pantalla de hormigón. La tecnología de ejecución se parece a la de la presa Mayarí, lo que la altura es menor, pues tiene 44 metros. Poseerá una longitud por el cierre de 350 metros y se empleará como vaso comunicante de las aguas de la presa Miguel, en Sagua de Tánamo (a través del túnel Miguel-Levisa), y de las provenientes del escurrimiento de la presa Sagua hacia la presa Mayarí».
Al ingeniero Álvarez sería un error calificarlo como novel en estos trabajos porque se fogueó en la República Popular China y en la construcción de la presa Mayarí. Junto a uno de sus compañeros de Raudal se ha centrado en investigar cómo deberían sustituirse materiales y recursos que deben ser importados empleando otros del país que además le confieran mayor seguridad a la construcción de túneles.
A su juicio, el sistema de collera es muy ventajoso con respecto a los métodos tradicionales de construcción de presas en Cuba: «La mayoría de los embalses que se diseñan y construyen aquí son de tecnología de núcleo de arcilla con materiales rocosos. Estos presentan la peculiaridad de que, como el núcleo impermeable se encuentra en el centro de la cortina, todo el material situado aguas arriba está siempre saturado y hay que darle mayor estabilidad a la obra», precisa.
«Sin embargo, las de collera disponen del elemento impermeable en contacto con el agua, y al estar el material interno seco se garantiza disminuir el tiempo de ejecución y los volúmenes de colocación de este. Además, ese método se refuerza con varias protecciones, porque ese elemento impermeable es una pantalla de hormigón y cuenta con un sistema de drenaje interior».
La presa Levisa tendrá una capacidad de almacenamiento de 6,8 millones de metros cúbicos. A pesar de que se considera de bajo volumen, el escurrimiento del río Levisa y el agua procedente del Este (de las presas Sagua, Castro y Miguel) será de 80 millones de metros cúbicos.
Estos se trasvasarán por un sistema de túneles a presión que comenzará en la margen izquierda. El primero, de 18 kilómetros, está hoy en ejecución. El nivel hídrico que pudiera alcanzarse acá (496 metros normalmente) es muy favorable para que se trasvase mediante gravedad.
En esta zona de Levisa, al este mayaricero, también se registran muchas precipitaciones anuales, como en otras áreas comprendidas en el trasvase Este-Oeste, un conjunto de obras que, al decir del General de Ejército Raúl Castro, «tiene una tremenda importancia en el momento actual, pero lo tiene mucho más de cara al futuro».