La medida vino en el momento oportuno y demandó un esfuerzo muy grande de todas autoridades y funcionarios, no solo del sistema financiero, sino de las locales y el Gobierno central, porque el incremento salarial se realizó a mitad de año.
Así valoró Meisi Bolaños Weiss, ministra de Finanzas y Precios, el contexto en que se produjo el incremento salarial para el sector presupuestado el pasado año, gracias al cual se beneficiaron 1 400 000 trabajadores en todo el país.
En su comparecencia en el espacio informativo Mesa Redonda dijo que hubo que redireccionar todos los presupuestos y al mismo tiempo tomar medidas para controlar que los precios no coadyuvaran a una inflación inmediata.
Señaló que hubo un fuerte trabajo para captar ingresos y así respaldar el incremento salarial, el cual representó en un semestre más de 4 300 millones de pesos para gastos que no estaban planificados.
Bolaños Weiss expresó, además, que hay quienes esgrimen que administrativamente no se sostiene un control de los precios. «Quizás no les falta razón, pero también en un Estado como el nuestro, que tiene que garantizar la redistribución de los ingresos y que la capacidad de compra que se crea no disminuya, se necesitó exigir una regulación de precio y no permitir ni el incremento de los precios vigentes en el momento del aumento salarial, ni continuar con los abusivos».
Reconoció que en todos los territorios no se enfrenta sistemáticamente a los precios abusivos, los cuales no pocas veces son especulativos y sobrepasan las utilidades adecuadas y medias.
La Ministra de Finanzas y Precios llamó a la sensibilidad de los cubanos que aplican precios injustos. Dijo que el control popular y la denuncia de los precios abusivos, también debe jugar su papel al tiempo en que se debe continuar la batalla por la generación de bienes y fortalecer la oferta.
También se refirió a la situación que enfrenta el país con la contabilidad. Valoró a esta disciplina como un instrumento clarificador de los hechos económicos y no como una traba. En ese campo se ha venido avanzando, sobre todo en lo concerniente a frenar las indisciplinas tanto en el sector empresarial como presupuestado, apuntó.
Para que así ocurra, precisó que se establece el Sistema de Control Gubernamental, el cual permite controlar ingresos y gastos. No obstante, acotó que aún queda mucho por hacer en la disciplina contable en aras de que las decisiones oportunas y objetivas perfeccionen el sistema.
Señaló a la exigencia sistemática de cada consejo de dirección y cuadro en frente de las distintas actividades económicas como herramientas imprescindible para frenar los faltantes y desvíos. Bolaños Weiss afirmó que las cuentas por cobrar y pagar vencidas no son una causa, sino el resultado del descontrol, la falta de conciliación de las facturas, las imprecisiones en los contratos y otras violaciones.