El documental Celia, leyenda y presencia Autor: Roberto Suárez Publicado: 21/09/2017 | 04:53 pm
El intenso quehacer revolucionario de Celia Sánchez Manduley (9 de mayo de 1920-11 de enero de 1980) fue recordado este sábado en el Parque de los Mártires de Media Luna, su tierra natal.
Cientos de pobladores de todas las generaciones asistieron a la conmemoración, en la que se recordaron las virtudes de la heroína, quien organizó la red de apoyo al desembarco del Granma, tuvo una destacada participación en la lucha clandestina y fue la primera guerrillera del Ejército Rebelde.
En el acto —presidido por Teresa Amarelle Boué, miembro del Buró Político del Partido y secretaria general de la Federación de Mujeres Cubanas, y Federico Hernández Hernández, primer secretario del Partido en Granma—, se evocaron otras virtudes de la combatiente.
La ceremonia constituyó un recuento dramatúrgico de la vida de Celia, una persona amante de las bromas, las ocurrencias y el trabajo continuo, y quien vivió sus primeros 20 años en Media Luna.
En jornadas previas, jóvenes granmenses habían sostenido en Bayamo un intercambio con Edemis Tamayo Núñez, la Gallega, integrante del pelotón de Las Marianas, quien relató pasajes vinculados con Celia Sánchez. Asimismo, hubo actos de recordación en Pilón, donde la revolucionaria vivió de 1940 a 1956, y en Manzanillo, ciudad que fue testigo de algunas de sus acciones en la lucha clandestina.
Igualmente, este sábado, los capitalinos protagonizaron una peregrinación hasta el Panteón de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) en la Necrópolis de Colón, donde reposan sus restos mortales. Allí, una ofrenda floral de las FAR acompañó el homenaje, y los participantes también depositaron flores ante su tumba.
Según reporta la Agencia Cubana de Noticias, Eugenio Suárez Pérez, director de la Oficina de Asuntos Históricos del Consejo de Estado, institución creada por iniciativa de Celia en 1964, expresó que Cuba la recuerda hoy por su vida heroica, por su obra relevante y por el ejemplo de firmeza y lealtad que legó a todos los cubanos.
Añadió que hablar de la heroína es hablar de Fidel, Che, Raúl y Camilo y muchos otros imbricados en la historia de la Revolución. La huella de «nuestra flor más autóctona», dijo Suárez Pérez, está a lo largo de todo el país, desde el Palacio de Convenciones, en La Habana, hasta la Comandancia General de La Plata, en el corazón de la Sierra Maestra.