GUANTÁNAMO.— Como una de las obras de mayor impacto social aquí, se inició la construcción de una conductora que se extenderá por 15,1 kilómetros, desde la planta potabilizadora Guaso hasta una de las zonas urbanas del territorio más pobladas y complejas en cuanto a abasto y saneamiento.
Extendida ya a lo largo de 3,5 kilómetros, la obra, que beneficiará a unos 70 000 habitantes y a las más importantes fábricas del polo industrial no alimenticio del territorio, forma parte del proyecto de rehabilitación integral del este de la ciudad capital, inversión ejecutada con un crédito de 20 millones de dólares otorgado por la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP).
Según dijo a Juventud Rebelde la ingeniera geóloga Maryoris Rubio Bonome, directora de la unidad empresarial de base Proyectos Hidráulicos, el avance físico planificado hasta septiembre, que marcha según el cronograma y con estabilidad en los suministros de los materiales, permitirá que para esa fecha la conductora, aun sin estar concluida, entregue agua a unas 35 000 personas de la populosa barriada de San Justo.
Rubio Bonome precisó que la inversión incluye una conductora de 15,1 kilómetros desde la planta potabilizadora Guaso, un colector, redes internas, de alcantarillado y de drenaje pluvial, y una planta para el tratamiento de residuales.
El crédito fue firmado en 2014, pero se hizo operativo en febrero de 2015, cuando se inició el proceso de importación y licitación del equipamiento, sobre todo de una planta de residuales que debe incluir el reuso del agua y los sólidos.
Ha habido atrasos en el proceso de importación de equipos y componentes. Solo han entrado al país recursos por 2,7 millones de dólares, de poco más de 15 millones que deben recibirse antes de diciembre para el aseguramiento de la obra.
Entre los equipos se incluyen medios especializados que permitirán formar dos brigadas: una perteneciente a la UEB Redes Hidráulicas, para la ejecución de la conductora y las redes internas, y otra del Ministerio de la Construcción, para el drenaje y el alcantarillado.
Las obras deben terminar en 2019 y se extenderán por San Justo, los repartos Rubén López Sabariego, Río Guaso, Dabul, Villa Toa y, en general, a toda el área urbanizada del este de la ciudad de Guantánamo.