Presidente de Nicaragua, Daniel Ortega Saavedra Autor: José M. Correa Publicado: 21/09/2017 | 05:37 pm
«Cuba es una estrella solidaria irradiando su inmensa fuerza moral en toda América Latina, en África, en Asia, con la fuerza indoblegable de su pueblo y de todos nuestros pueblos, expulsando a los enemigos neocolonialistas e imperialistas», expresó el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, al hacer uso de la palabra en la celebración que tiene lugar este día en Santiago de Cuba.
El Moncada —dijo— es un testimonio vivo de la dignidad de los cubanos, de los pueblos de América y del mundo.
«Cuando llegábamos a Santiago de Cuba esta madrugada, los periodistas me preguntaban sobre el Moncada. Yo respondía que entonces yo tenía siete años de edad, cumplía ocho en noviembre. Pero cómo conocía sobre el asalto por mi padre, que estaba comprometido por la lucha revolucionaria y que conversaba con sus amigos, conspirando contra Anastasio Somoza, e identificándose con la lucha de los pueblos. El Moncada fue una sacudida», expresó.
«Luego, en el 66-67, en el IV Congreso Latinoamericano de Estudiantes, participé en La Habana y nos dieron un recorrido. No podía faltar el Moncada», recordó.
Desde Martí a Fidel, desde la batalla de Dos Ríos hasta el Moncada la bandera de Martí, desde el Moncada al Granma, del Granma a la Sierra, de la Sierra a la victoria, de la victoria del 59 a esta nueva batalla y estas nuevas victorias en la instalación del socialismo y la defensa de las ideas ante el imperialismo. Desde hace 60 años Cuba ha decidido vivir el combate permanente por la liberación y dignidad de su pueblo, afirmó.
«El Moncada, Fidel, Martí, encarnándose en el pueblo, en la salud, la educación, el deporte…, asumiendo la defensa de las conquistas básicas de la Revolución, enfrentando el Período Especial, enfrascado en la lucha por el regreso del niño Elián… Cuba encendiendo siempre la llama inextinguible, la llama de la Revolución», declaró.
En toda la lucha de Cuba ha estado siempre el ejemplo de la Revolución Cubana, de Fidel, de Raúl y de su pueblo heroico, precisó.
«Fidel y Chávez, es decir, el ALBA, forman parte de la batalla ingente que se ha iniciado. La Celac, cuya próxima cumbre se hará en Cuba, es parte también de los postulados de Martí, de Fidel, de Sandino y de todos nuestros próceres fundadores.
«Cuba ha sido sometida a las más brutales agresiones del imperio. Cuba es el mejor testimonio de que la justicia, la libertad, la soberanía, la independencia, pueden defenderse y pueden alcanzarse y mantenerse.
«Llegará el día en que el bloqueo se romperá. Cuando la inmensa mayoría de los pueblos de nuestro planeta lo pidan, eso será alcanzado», subrayó.
Nicaragua —dijo—, que desde el siglo antepasado ha librado luchas contra el imperio, que ha enfrentado a las tropas yanquis, los saluda.
«Nicaragua, 20 años después de la Revolución Cubana, alcanzó la victoria. Reciban hermanos, familias cubanas, reciba la gloriosa Revolución Cubana, el abrazo de la revolución popular sandinista y del pueblo nicaragüense. Que vivan los pueblos de América Latina y del mundo», concluyó.