Arístides Hernández (Ares), a la derecha, destacó la trayectoria de Lloyy en el humorismo gráfico cubano. Autor: Calixto N. Llanes Publicado: 21/09/2017 | 05:16 pm
Aunque nos tiene acostumbrados a sus caricaturas en las páginas del dedeté, Palante y El Habanero, esta vez el joven Jorge Martínez Rodríguez (Lloyy) sorprende con verdaderas obras de arte, que fusionan con gracia y maestría técnicas como el dibujo y la escultura.
Así lo pudieron constatar quienes asistieron este miércoles a la galería Francisco Vázquez, de la Editora Juventud Rebelde, para disfrutar de Otra dimensión, una exposición que recoge una muestra de 20 caricaturas en formato 3D.
Según el autor, el objetivo no ha sido otro que captar imágenes graciosas de personajes conocidos, que por sus rasgos físicos permitieran crear una caricatura, y en algunos casos añadirles detalles que los contextualizan en su vida pública.
Tal es el caso de cantantes como Mick Jagger y Marc Anthony, actores y actrices como Thomas Jack Black, Sophie Marceau o Gerard Depardieu; artistas como Pablo Ruiz Picasso; el político estadounidense Ted Kennedy; e incluso el boxeador profesional filipino Manny «Pac-Man» Pacquiao.
Pero en lugar de conformarse con la horizontalidad de los dibujos, lo curioso es que Lloyy se valiera de sus habilidades en la escultura para darle volumen a las formas.
«Siempre me han llamado la atención las obras tridimensionales, aunque habitualmente solo se hacen en formato digital. En mi caso, lo que hice fue buscar esa tridimensionalidad con esculturas hechas de poliuretano y así, en lugar de un retrato plano, crear un volumen real en los rostros de las caricaturas», explicó.
Jorge Martínez Rodríguez ha incursionado en el humor gráfico por más de 20 años y ha obtenido más de 30 premios en países como Portugal, Japón y Francia. Entre sus principales logros está haber batido el récord iberoamericano y mundial de más tiempo dibujando caricaturas (no homologado por la casa Guinness), con la realización de 1 336 dibujos en 26 horas.
La presentación de Otra dimensión contó, además, con la actuación del joven artista Jorge Bacallao, quien, desde el humor y la reflexión, regaló a los presentes un simpático monólogo sobre la cubanía.