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El programa de desarrollo mular en Cuba incluye un severo control sanitario de los ejemplares que intervienen en la reproducción para evitar la transmisión de enfermedades congénitas. Autor: Internet Publicado: 21/09/2017 | 05:03 pm
SANTA CLARA.— Una treintena de burros criollos y alrededor de 200 yeguas patibarcinas sostienen el programa de reproducción mular en Villa Clara, con los cuales se asegura una descendencia pura genéticamente.
Ernesto Medina, presidente de la Asociación Cubana de Producción Animal (ACPA) en el territorio, explicó que para lograr los actuales mulos se emplean progenitores sanos y libres de enfermedades endémicas.
La mala calidad de los burros y las hembras equinas destinadas para obtener los híbridos en Cuba, fue la causa principal del deterioro de estos animales, comentó.
Por deficiencias hereditarias reportaban pequeña estatura, poca fuerza en el tiro y mala salud, lo que provocó un considerable descenso en los rebaños, acotó.
Hace casi dos décadas comenzó el programa de mejoramiento genético del ganado asnal en Cuba, el cual está sustentado en el empleo de individuos de diferentes razas foráneas, para erradicar la consanguinidad existente en el territorio, comentó.
El apareamiento de los borricos provenientes de otras naciones con ejemplares criollos, logró una generación de animales con pureza de sangre y mejores parámetros morfológicos, añadió.
Actualmente estos sementales se conjugan con yeguas Patibarcinas, raza cubana de gran fortaleza física, que asegura una descendencia resistente y adaptable al trabajo en las montañas, comentó Leonardo González, especialista del Ministerio de la Agricultura, en Villa Clara.
Esta provincia mantiene un ritmo estable en la obtención de mulos destinados a la conformación de arrias, conjuntos de hasta 10 híbridos y que resultan vitales para las labores de carga y transportación en las lomas, agregó.
De enero a la fecha se reporta en Villa Clara el nacimiento de 70 individuos, lo cual muestra la efectividad de los cerca de 20 patios de procreación existentes, significó.
El programa de desarrollo mular en Cuba incluye un severo control sanitario de los ejemplares que intervienen en la reproducción para evitar la transmisión de enfermedades congénitas, como la anemia infecciosa equina, que provoca severos daños, concluyó.
