Una de la seciones del Coloquio, este jueves, en Holguín. Autor: Juan Pablo Carreras/(AIN) Publicado: 21/09/2017 | 05:03 pm
HOLGUÍN.— El escandaloso ocultamiento mediático del proceso contra los Cinco Héroes evidencia la total inocencia de estos y el compromiso de sucesivas administraciones norteamericanas con terroristas radicados en su propio territorio, aseveró el miembro del Buró Político del Partido, Ricardo Alarcón de Quesada.
Al dirigirse a través de un mensaje audiovisual a los delegados al VI Coloquio por la Liberación de Gerardo, René, Antonio, Fernando y Ramón, el Presidente de la Asamblea Nacional argumentó que si ellos hubiesen cometido alguna falta grave, en detrimento de la seguridad del pueblo estadounidense, este habría sido el primero en enterarse mediante sus medios de comunicación, pero ello no ha sucedido.
Alarcón meditó en el hecho de que si Cuba y su Revolución han sido objetivos de las campañas mediáticas orquestadas desde ese territorio durante medio siglo, cómo puede explicarse entonces que el caso más dilatado de la historia judicial de esa nación no resulte archiconocido.
Apuntó que ningún medio de prensa ha difundido todavía lo reflejado en las actas de la Fiscalía, cuando a la vez de reconocer que la motivación de los Cinco era luchar contra las actividades terroristas contra Cuba, excluyó la dilucidación de ese particular ante el Jurado e insistió en juzgarlos solo por las violaciones cometidas a la ley.
El Presidente del Parlamento cubano sentenció en su mensaje que estos héroes sufren un doble encierro: primero, en cárceles de máxima seguridad de Estados Unidos y después, como consecuencia del silencio de los grandes monopolios de la información.
Otro hecho revelador del amañado proceso fue la presión ejercida a la Corte de Apelaciones de Atlanta, por el entonces fiscal general del gobierno de George W. Bush, para que se dejara sin lugar su dictamen acerca de la ilegitimidad del juicio al haber tenido lugar en la ciudad de Miami, donde círculos de mafiosos anticubanos poseen gran influencia.
Alarcón reconoció la labor de los comités de solidaridad en todo el mundo a favor de la causa e insistió en redoblar los esfuerzos para conseguir que el presidente Obama —quien posee esa prerrogativa— proceda a liberarlos y regresen junto a sus familiares.