LAS TUNAS.—La sensibilidad es un atributo consustancial a la buena fotografía. Y Pastor Batista Valdés, el corresponsal del periódico Granma en esta provincia, la tiene por arrobas. Buscador incansable de «cosas» diferentes, las imágenes curiosas suelen estar siempre «en el punto rojo de su colimador». Como esta que les propongo, tomada con su cámara frente a la entrada del Hotel Las Tunas. Se trata de los troncos de dos palmas de corojo, que la madre natura aproximó caprichosamente para ofrecernos un remedo de alta sensualidad.