CINCO PALMAS, GRANMA, diciembre 18.- Miles de personas reafirmaron hoy que el pueblo cubano hizo suyos y multiplica el valor y la fe en la victoria, que animaron a los expedicionarios del yate Granma, reagrupados hace medio siglo en este sitio del municipio de Media Luna.
Los Comandantes de la Revolución Juan Almeida Bosque, Ramiro Valdés Menéndez, y Guillermo García Frías, presidieron la tribuna abierta por el aniversario 50 del acontecimiento, en el mismo sitio donde Fidel y Raúl Castro se abrazaron la noche del 18 de diciembre de 1956.
En aquella ocasión, al constatar la existencia de ocho hombre y siete fusiles, el Comandante en jefe exclamó: "í Ahora sí ganamos la guerra!"
Almeida Bosque, Valdés Menéndez, Ernesto Che Guevara, Camilo Cienfuegos y otros expedicionarios, llegaron a Cinco Palmas el 21 de diciembre de 1956.
Guillermo García Frías sobresalió en la ayuda popular a los combatientes y resultó el primer campesino incorporado al Ejército Rebelde.
También presidió la rememoración el General de Cuerpo de Ejército Ramón Espinosa Martín, miembro del Buró Político del Partido Comunista de Cuba (PCC) y Jefe del Ejército Oriental. Al resumir el acto de recordación, Lázaro Expósito Canto, primer secretario del PCC en la provincia de Granma, afirmó que el ejemplo de Fidel y sus hombres vivirá eternamente en el recuerdo del pueblo.
Recordó que, procedentes de México, los 82 expedicionarios del Granma desembarcaron en Cuba el dos de diciembre de 1956, tres días después fueron sorprendidos y dispersados, tras lo cual 20 resultaron asesinados y 21 prisioneros. Destacó la labor de una red previamente organizada por la heroína Celia Sánchez Manduley y decenas de campesinos, que de forma espontánea ayudaron a los revolucionarios.
Con Fidel al frente, dijo, 16 de ellos se reagruparon en la finca El Salvador, perteneciente al guajiro Ramón Pérez Montano, en el barrio de Purial de Vicana, en el actual municipio de Media Luna.
Un combatiente fue enviado a cumplir misiones en las ciudades, y los demás partieron hacia zonas intrincadas de la Sierra Maestra para continuar la guerra que derrocaría a la tiranía pronorteamericana de Fulgencio Batista, e iniciaría cambios sociales sin precedentes en la Isla, señaló.
En la recordación, alumnos de la escuela de arte de Granma escenificaron el desembarco, la dispersión y el reencuentro de los expedicionarios; y el cantautor Cándido Fabré estrenó su canción Yo también oré, dedicada al Comandante en Jefe. Entre los campesinos que ayudaron al reencuentro de los combatientes sobresalieron los hermanos Crescencio, Ramón y Eduviges Pérez; Sergio e Ignacio, hijos del primero, y Baurel, descendiente de Eduviges.
También se destacaron Adrián García, su esposa Elba Frías y Guillermo, Domingo y Lorenzo, hijos de ambos; Luis Cedeño, Baldomero Tamayo, Neno Hidalgo, Carlos Más, Ricardo Pérez, Perucho Carrillo, Eutiquio Naranjo, Argelio Rosabal, Severo Pérez y otros, concluye la Agencia de Información Nacional.