Frente al espejo
«Maestro Ciro: Me quito el sombrero ante sus escritos de domingo (Así era La Habana en 1820, Ciro Bianchi Ross, página dominical de Lectura, 26 de mayo). Usted “pinta” aquella época con matices tan vívidos que a uno le parece estar viendo una película o sencillamente viviendo junto a generaciones anteriores. Muchas gracias». (Caro)
«Excelente reflexión, Pepe (La marca de una camisa, José Alejandro Rodríguez, espacio sabatino La Crónica, 25 de mayo). Recientemente estuve leyendo sobre la tragedia aquella. Las condiciones de trabajo son horribles. Y también es cierto que con el cuento del fair trade y otras medidas cosméticas, los principales responsables —grandes corporaciones como H&M, Mango, etc.— intentan crear sentimiento de culpa en los consumidores finales —que son los que menos plata tienen— y exonerarse al mismo tiempo ellos mismos de toda culpa. Típico de la sociedad industrializada moderna: siempre tratan de cortar por donde menos hay. Está bien que conserves tu camisa Dockers porque, al final, la responsabilidad estructural es de otros más poderosos y con cero sentimiento de culpa». (Andrés)