Frente al espejo
«No dispongo del acertado calificativo para su escrito Solidario por cuenta propia (José Alejandro Rodríguez, 11 de noviembre). Si de algo padecemos los cubanos, es del “mal” de la solidaridad. Somos criticones, pero a la hora de dar una mano al caído somos los primeros. Tal vez seamos bastante indisciplinados y faltones, pero tenemos muy arraigada en nosotros la solidaridad. Recuerdo aquel terrible terremoto que sufrió un pueblo hermano, cuando aparte de la ayuda que pudo prestar nuestro Gobierno, el pueblo hacía filas para donar su sangre en bello gesto en favor de los que estaban en dificultades. Si se ha hecho por otros pueblos, ¿por qué no hacerlo por nuestros compatriotas? El Gobierno está haciendo un gran esfuerzo por aminorar los daños que ese huracán dejó en las tres provincias más orientales, ha tomado medidas para que a los afectados no les cuesten tanto las reparaciones de sus viviendas, y con la ayuda de países y organizaciones internacionales, y hasta se está canalizando la ayuda de la población. En estos momentos, el pueblo cubano tiene que ser uno solo…». (Tide)
«¡Qué bien Lázaro, pero no son solo esas cosas —que muy bien dices— las únicas que deben cambiar en ese país (EE. UU). Hay muchísimas más que por espacio no caben (Adiós a Pinocho, y que le vaya bien, Lázaro Fariñas, 13 de noviembre). Mis felicitaciones por tus valientes comentarios y cuídate mucho, que por ahí andan sueltos algunos personajes peligrosos que se creen impunes». (Modesto)