Acuse de recibo
El pasado 3 de septiembre, Oscar Lage Flores denunciaba aquí que los pacientes que reciben quimioterapia ambulatoria en el Instituto Nacional de Oncología y Radiología, en la capital, no tienen las mejores condiciones en el salón de espera para ese tratamiento.
Precisaba la falta de ventilación, agua y baños, y calificaba de demasiado incómodos los asientos de espera, si se piensa que son para personas que sufrieron intervenciones quirúrgicas o tienen lesiones en diferentes partes del cuerpo. También señalaba la gran aglomeración de personal allí, pues, al parecer, no se previó que cada paciente va acompañado de uno o varios familiares, por su delicada salud.
Tal atmósfera, decía, se torna difícil para un enfermo que debe permanecer en ese lugar desde antes de las 9:00 a.m. y que puede terminar pasadas las 6:00 p.m. Y alertaba sobre el área de Laboratorio que se utiliza en estos momentos, la cual tampoco cumple las condiciones, en un lugar muy pequeño y sin climatización, y donde se atiende diariamente hasta 150 pacientes. Para agravar, su área de espera es compartida con la de curaciones.
Oscar solicitaba a la dirección del hospital, en la medida de sus posibilidades, que modificara esta situación.
Al respecto, responde el doctor Luis Curbelo Alfonso, director del Instituto, que los problemas planteados son reales y habían sido identificados. «Pero nos faltó celeridad en su solución —señala—, lo cual analizamos en un Consejo de Dirección críticamente y lo convertimos en un ejemplo de cuestiones que no pueden suceder en nuestra institución».
Informa que se ubicaron en el lobby externo del servicio de Quimioterapia Ambulatoria diez bancadas confortables de cuatro asientos cada una, las cuales, unidas a los 30 asientos del lobby interno, favorecen el flujo adecuado y la estancia de pacientes y familiares, evitando además la aglomeración de personas.
También se abrió la puerta de acceso por la calle 29, al incrementarse los agentes de seguridad en la institución. Y ubicaron tres ventiladores, que permiten disipar las altas temperaturas existentes.
«Estamos trabajando en el mejoramiento del resto de los servicios, añade, en aras de que todo paciente y familiar que acuda a recibir nuestra atención perciba un ambiente de seguridad y confianza».
Aclara que los baños para los pacientes de Quimioterapia Ambulatoria se hallan dentro de ese servicio, y en el caso de los acompañantes, están ubicados en la Unidad de Urgencias Oncológicas.
También al salón de espera del Laboratorio Clínico se le realizaron acciones de mantenimiento de la climatización, pintura, plomería, sustitución de tomacorrientes y luminarias, al tiempo que se ubicaron bancadas para complementar el confort en el área de extracciones.
Jean Freddy Martínez Guilarte (Osvaldo Herrera 57, interior, entre 2da. y 3ra., reparto Jesús Menéndez, Bayamo) cuenta que el 30 de abril del presente año adquirió en la Terminal de Ómnibus de Bayamo dos pasajes de ida hacia La Habana con fecha 7 de junio, y dos de retorno para el 16 de ese mes, pues debía acompañar a su esposa a un turno médico para una delicada operación con láser en el Pando Ferrer.
A causa de situaciones familiares en los días posteriores a la reservación, extraviaron los boletines, que son apenas unas tirillas de papel de tres centímetros de ancho por seis centímetros de largo, aproximadamente.
Entonces se personaron en la Terminal, donde les atendió la jefa de turno, quien les remitió a la oficina donde se venden los boletines. Se comprobó que allí constaban en los documentos las reservaciones ya vendidas y pagadas con los asientos correspondientes, ida y regreso.
No obstante, la jefa de turno apuntó que lo establecido era volver a pagar el ciento por ciento del valor de los pasajes extraviados.
«No entendimos el porqué, si todo en sus documentos estaba en orden. El importe de los cuatro pasajes fue de 576.00 CUP y este mismo valor tuvimos que volver a pagar: 576.00 CUP, para un total de 1 152.00 CUP. ¿Por qué debo pagar de nuevo el total del valor si nadie puede utilizar estos boletos, si no es con el carné de identidad? Además, lo comunicamos antes de la fecha de la reservación. ¿Quiénes son los que dictan tales regulaciones?»
«Considero que esto es abusivo. Que los directivos no sigan dando orientaciones y regulaciones que afectan y maltratan, que elaboren métodos y procedimientos que ayuden a soluciones que no sean traumáticas para ningunas de las partes implicadas», concluye.