Acuse de recibo
EL pasado 9 de septiembre Gilsa María González irrumpió aquí muy molesta. Trabajadora de ETECSA en la ciudad granmense de Manzanillo, refería que el 29 de junio la habían despedido de su centro laboral, sin explicaciones.
Contaba ella que el 5 de julio hizo su reclamación ante el Órgano de Justicia Laboral de Base (OJLB), y le dijeron que el mismo no podía dirimir el conflicto, porque el presidente del mismo tenía parte en el asunto, ya que la esposa de este laboraba junto a la demandante. Y otro integrante del OJLB estuvo en la comisión que tomó la medida administrativa.
También señalaba la lectora que había sido transferida en su reclamación, por la jurídica de ETECSA en Granma, para el OJLB de Correos en Manzanillo, el cual en esos momentos, ni siquiera existía. Y la presidenta de este le alegaba que no tenía la preparación suficiente para encarar su caso.
Gilsa María cuestionaba que la jurídica de ETECSA tuviera facultad para transferir la justicia laboral a otra entidad. Y seguía esperando...
Ahora responde Reynaldo Mavilio Ortega, director central de Recursos Humanos en ETECSA, que el Centro de Tráfico Manual de Manzanillo fue cerrado el 7 de julio de 2006, por el proceso de digitalización de la telefonía. Y quedaron disponibles, desde el 1ro. de agosto de ese año, 57 operadoras nacionales, entre ellas Gilsa María. Las disponibles, asegura, recibieron el tratamiento laboral y salarial previsto en la legislación. La comisión constituida para evaluar, de acuerdo con el principio del mejor derecho, reubicó en febrero de 2007, y Gilsa María fue beneficiada en tal sentido.
Al presentarse reclamaciones de quienes no fueron seleccionadas, el Tribunal Municipal de Manzanillo, «al advertir irregularidades en el proceso, dispuso anular el mismo y retrotraerlo hasta la elección de la comisión, para realizar nuevamente la selección de las trabajadoras que debían ocupar plazas».
El 6 de junio, en asamblea con todos los trabajadores, incluyendo a las disponibles, se eligió la nueva Comisión que evaluaría la reubicación del personal, sobre la base del principio de idoneidad. Y esa comisión, luego de efectuar las comprobaciones y acciones necesarias, así como la evaluación integral de todas, dio a conocer los elementos que se tuvieron en cuenta, el análisis realizado, los resultados obtenidos y las trabajadoras con mejor derecho para ocupar las plazas existentes.
En ese nuevo proceso, agrega, Gilsa María no fue seleccionada dentro de las que debían ocupar las plazas, por considerar la Comisión que otras compañeras tenían mejor derecho, lo que determinó el 30 de junio de 2007 el cese de su labor en el Centro de Multiservicios, para retornar de nuevo a la condición de disponible, con el tratamiento salarial establecido.
Y fue después que, inconformes con la decisión, varias trabajadoras reclamaron ante el OJLB del Centro Telefónico de Manzanillo. Fueron las direcciones Provincial y Municipal de Trabajo, asegura, las que transfirieron el caso al OJLB de Correos, que se había constituido el 7 de junio de 2007 y no el 20 de julio como señalaba Gilsa María, asegura Reynaldo Mavilio.
Subraya el funcionario que, finalmente, la Dirección Provincial de Trabajo determinó que el caso fuera atendido por el OJLB de la Dirección Municipal de Trabajo. «El proceso, afirma, fue sometido a la jurisdicción del Tribunal Municipal Popular en ese territorio, donde continúa tramitándose actualmente».
Apunta también que durante todo el período, Gilsa María ha recibido el tratamiento laboral y salarial previsto en la legislación para el personal disponible, el cual continuará percibiendo hasta tanto se logre su reubicación definitiva dentro o fuera de la entidad; «todo lo cual demuestra que ni se ha improvisado ni relegado, como se expresara en el artículo, algo tan serio como la justicia laboral», afirma finalmente.