La Corte Suprema optó por seguir las instrucciones del gobierno de los Estados Unidos sin importar el fuerte batacazo a la credibilidad del sistema judicial norteamericano y las miles de voces de todo el mundo que le pidieron que aceptara revisar el caso de los cinco antiterroristas cubanos. Dijo: No. Se cubrió de infamia. Pero la lucha no ha cesado ni un solo instante desde ese vergonzoso 15 de junio.
Aunque pareciera que todos los caminos quedaron cerrados, el equipo legal encargado de la defensa de Gerardo Hernández, René González, Antonio Guerrero, Fernando González y Ramón Labañino se prepara para reabrir el frente judicial. Mientras, desde los más disímiles rincones de la tierra continúa y crece la batalla política y la solidaridad internacional, que no cesará hasta que ellos regresen a la patria, a sus familias.
Durante un encuentro con la prensa cubana en La Habana, Tom Goldstein, encargado del proceso de apelación al Supremo, explicó que los esfuerzos a favor de los Cinco no han concluido. Además apuntó que los abogados se sienten optimistas de poder lograr triunfos en los dos momentos que siguen tras la negativa de la máxima autoridad legal de EE.UU.
Desde el punto de vista judicial ahora el equipo de juristas del que forman parte se prepara para: primero, enfrentar las nuevas sentencias que deberán imponer en Miami a Fernando, Tony y Ramón, luego que la Corte de Apelaciones de Atlanta anulara las sentencias del juicio inicial por no haberlos encontrado culpables de enviar información secreta, e instruyera a la jueza Joan Lenard proceder a las resentencias. Segundo, intentar reabrir el caso de Gerardo a través de la apelación indirecta, en vista de que ya se agotaron todas las vías directas dentro del sistema legal estadounidense. En ese sentido, tienen un año para preparar todos los argumentos que develen los errores fundamentales cometidos por las autoridades judiciales de EE.UU. durante el proceso y con ello lograr la reapertura.
Goldstein también mencionó la importancia de que paralelamente se incrementen los esfuerzos político-diplomáticos.
« (...) es posible una solución política para un caso que realmente tiene aspectos políticos», subrayó el letrado.
ResentenciasSegún dieron a conocer, la fecha preliminar para la resentencia de Fernando, Tony y Ramón es el 13 de octubre. Ahora mismo los abogados trabajan en la preparación de la documentación necesaria y el análisis de aspectos dentro del amañado proceso que puedan mitigar las sentencias.
«Es muy importante que no impongan una sentencia irrazonable y vamos a seguir peleando para ver cuánto más podemos lograr», indicó Richard Klugh, especialista en apelaciones dentro del equipo legal.
Por su parte, Leonard Weinglass, otro de los letrados, aseguró que los tres que deben ser resentenciados van a enfrentar reglas distintas a las existentes en el año 2001.
«Bajo esas nuevas reglas pensamos que las cadenas perpetuas (de Ramón y Antonio) sean eliminadas y existan nuevas sentencias, que sean menores», señaló.
Otro de los elementos esperanzadores para los juristas, son los cambios ocurridos en Miami, por ejemplo en términos demográficos o el repliegue de los elementos fanáticos de esa comunidad, como apuntó Rafael Anglada, quien además aseguró que también la actitud del gobierno norteamericano debiera cambiar.
«No puedo predecir cuáles serán las sentencias, pero puedo anticipar el mejoramiento en las sentencias de los tres y la eliminación de las cadenas perpetuas», expresó Weinglass.
Todos los abogados coincidieron en que de aquí al 13 de octubre queda mucho por hacer, especialmente para tenerlo todo listo. Bill Norris adelantó la estrategia:
«En primer lugar, tenemos que hacer que los tres que van a ser resentenciados —Antonio, Fernando y Ramón— regresen a Miami para reunirnos con ellos y prepararnos. Segundo, lograr que el gobierno nos entregue la información que necesitamos para hacer una preparación adecuada. Tercero, vamos a discutir con el gobierno la posibilidad de reducir los asuntos y conseguir un resultado que sea justo para los tres y que regresen a Cuba lo más pronto posible».
Tom Goldstein destacó que ahora la jueza Joan Lenard debe tomar en consideración el largo término que han permanecido en prisión, el sufrimiento tanto para ellos como para sus familias, el reconocimiento de la comunidad internacional y debe imponer una sentencia sustantivamente menor.
Tener que analizar las distintas situaciones, el conjunto de circunstancias durante todo el proceso, y no embarcarse en números o estadísticas matemáticas para dictar sentencia está dentro de los cambios que experimentaron las reglas judiciales.
Entre los elementos a presentar está el hecho de que durante 11 años ninguno ha tenido un incidente disciplinario, a pesar de las difíciles condiciones carcelarias que han sufrido. En el caso de Tony, como recordó Anglada, se suma las clases de pintura y ajedrez creadas por él en la cárcel para los reclusos, o los cursos de Inglés o Matemática que ha impartido.
El propio Rafael Anglada aprovechó la ocasión para excusar a Tony, Fernando y Ramón, quienes serán trasladados a Miami, por si algunos amigos del mundo no reciben respuestas de sus cartas. Durante el proceso de traslado, que como apuntó nunca es lineal, pueden perderse algunas misivas, libros y documentos que ellos reciben desde todos los continentes.
El presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular, Ricardo Alarcón de Quesada, presente en el intercambio con la prensa, subrayó que los Cinco han permanecido en prisión más tiempo que otras personas que han sido condenadas por espionaje real. Así que la resentencia debería conducir a libertad inmediata por permanecer en prisión durante más de una década.
«Hay que dar la batalla para que así sea», dijo.
Gerardo«La situación de Gerardo Hernández es la más difícil y es la injusticia más grande que se ha cometido en este caso» aseveró Joaquín Méndez, abogado miembro del equipo legal.
A partir de esa verdad irrebatible los letrados intentarán para junio del próximo año reabrir el caso de este compañero, quien como los demás lleva más de una década prisionero injustamente y, por si fuera poco, el gobierno estadounidense le niega la visa a su esposa para que esta lo visite en la prisión de la lejana California.
«No estuvimos de acuerdo con el fallo de la Corte de Apelaciones de no enviar a Gerardo a la resentencia», reafirmó Weinglass —incluso esa es una de las contradicciones que debía resolver la Corte Suprema si aceptaba revisar el caso, acotó Alarcón—, «pero si nosotros logramos eliminar el cargo de conspiración para cometer asesinato —el cargo tres— en lo cual trabajamos en estos momentos, entonces Gerardo deberá ser resentenciado, lo mismo que Ramón, Antonio y Fernando. Primero tenemos que eliminar ese cargo y nosotros esperamos que podemos hacerlo», sentenció el abogado estadounidense.
Por su parte, Goldstein expuso que el equipo legal presentará el argumento de que la condena por conspiración para cometer asesinato es absurda... «(...) pensamos que podemos mostrar a los tribunales que existen nueve evidencias que nunca fueron analizadas y que él (Gerardo) no tuvo que ver con ningún plan para asesinar a nadie en la jurisdicción estadounidense o en cualquier otro lugar», reveló.
Para Richard Klugh, ahora se encuentran exactamente en la etapa de preparación de la moción para corregir la sentencia ante la corte de distrito de Miami, basada en las nueve evidencias mencionadas por Golsdtein. Para ello, según explicó, los abogados tiene un año para prepararse y una vez iniciado, deben convocar a testigos, presentar documentos y evidencias nuevamente.
En este punto saltaron las alarmas de los reporteros. Sin embargo, el abogado corroboró las sospechas y también ponderó las fortalezas llegado a este punto: «Es como empezar de nuevo, pero con todo lo que hemos aprendido con relación a la actuación de los fiscales y con las evidencias acumuladas por los menos en los últimos ocho años».
«Tenemos un año para hacerlo y lo más importante es tener tiempo para prepararnos bien... de esa forma pensamos lograr una victoria en la apelación indirecta», indicó Klugh.
También en el caso de Gerardo pesarán las mitigaciones de sentencia que los abogados tratarán de mostrar. Además de las mencionadas, válidas a los Cinco, se incluye el hecho de que Gerardo salvó la vida de un reo que pensaba suicidarse. Gerardo logró, como explicó Anglada, a través de Adriana, esa valerosa mujer a quien le impiden ver a su esposo, conseguir la dirección y el teléfono de los familiares de ese recluso de origen cubano.
Pero quien mejor resumió el espíritu que tiene la estrategia para poner fin a la injusticia contra Gerardo Hernández y con los Cinco en general, tanto desde el frente judicial como del político, fue el titular de nuestro Parlamento.
«El caso de Gerardo hay que abrirlo con cuanto recurso se pueda aplicar, tenemos que abrirlo con las manos, con los dientes, con las uñas, si hace falta. Mientras él no sea liberado igual que los demás, será imposible tener una relación normal con Estados Unidos».
RenéSobre las perspectivas y situación de René González, quien tampoco será resentenciado, su abogado, Phil Horowitz, detalló durante el encuentro.
«El caso de René es bastante diferente. Su sentencia terminará en poco más de dos años, aproximadamente en 27 meses... y en ese tiempo René mira hacia delante para regresar a su casa, con su esposa e hijas», apuntó.
Según reconoció, René debe estar en prisión hasta el 11 de octubre de 2011.
«Tendrá a partir de ahí tres años de libertad supervisada, lo cual es equivalente a la libertad condicional. Esperamos que por razones de compasión y como ciudadano cubano, pueda regresar a su casa».
El abogado reiteró la denuncia de que su esposa no ha podido visitarlo desde 2001 por la reiterada negativa del gobierno estadounidense. En ese sentido declaró que continúan los esfuerzos para que tanto Adriana como Olga puedan visitar a sus esposos, un derecho que les ha sido negado por Washington.