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«Esta apelación del gobierno es simplemente más de lo mismo», afirmó José Pertierra, el abogado que representa a Venezuela en el proceso de extradición de Luis Posada Carriles.
Consultado vía telefónica por Cubadebate, Pertierra comentó la decisión de la Fiscalía estadounidense, que ha pedido reconsiderar un fallo que dejó en libertad al terrorista, acusado en Estados Unidos por fraude inmigratorio, a pesar de tener un juicio pendiente en Venezuela por la voladura de un avión civil en pleno vuelo, el 6 de octubre de 1976.
La Fiscalía estadounidense presentó este miércoles en una escueta nota la apelación al Quinto Circuito en New Orleans, que tiene la potestad para revisar las decisiones del tribunal penal de primera instancia en El Paso, donde fue emitida el 8 de mayo pasado la decisión de la jueza Kathleen Cardone. Ella desestimó el proceso judicial por fraude migratorio que se seguía contra Posada Carriles, después de descartar la prueba principal del caso, al considerar que el proceso no tenía suficiente sustento.
José Pertierra aclaró que la Fiscalía no tiene la obligación de desarrollar aún la sustancia de la apelación. «Lo hará cuando haya recibido como récord certificado la trascripción de las audiencias ante el tribunal de primera instancia (es decir, de El Paso). Después de haber recibido la trascripción, la Fiscalía tendrá que presentar sus argumentos legales para apoyar la apelación», dijo.
Sobre la razón de por qué el gobierno estadounidense esperó hasta el último momento para apelar, el abogado comentó que «el interés principal parece ser demorar el proceso para tratar de tapar el amparo que verdaderamente Estados Unidos le ofrece al terrorista».
Aunque la Fiscalía gane la apelación y eventualmente pueda condenar a Posada por todos los delitos de fraude inmigratorio que acusa —añadió Pertierra—, «Posada seguiría libre ya que la máxima condena que puede imponerle la jueza Cardone es de 12 meses de prisión y Posada ha estado preso por más de un año».
¿Por qué entonces han apelado? Pertierra respondió que «la apelación prolonga la apariencia de estar procesando penalmente a Posada por algo. Una apelación puede demorarse varios meses (quizá más). Mientras tanto, el Fiscal General puede seguir diciéndonos que el Departamento de Justicia está procesando a Posada y que han sido los jueces quienes lo han liberado».
El jurista, cuyo bufete se encuentra en Washington, aseguró que esta apelación «es otro esfuerzo de la Casa Blanca para tratar de mostrar ante la opinión pública una farsa de justicia. Estados Unidos tiene recursos legales y evidencias de sobra para inculpar seriamente a Posada Carriles como terrorista.»
La administración de George W. Bush no ha respondido a la solicitud de extradición a Venezuela, presentada el 15 de junio de 2005, ni ha procesado a Luis Posada Carriles por homicidio o por terrorismo, sino como un indocumentado que mintió cuando llenó los formularios de inmigración al entrar ilegalmente al país.
«Para ocultar el hecho de que está protegiéndolo, la Casa Blanca pretende procesar al terrorista ante los tribunales federales por serias felonías, delitos que solo cuando los examinamos cuidadosamente nos damos cuenta de que Posada saldría libre aun si lo condenan por haberlos cometido», aseguró Pertierra.
«Esta apelación es simplemente más de lo mismo», concluyó.
