Ulises Guilarte de Nacimiento, secretario general de la CTC, pronunció las palabras de apertura del desfile. Autor: Roberto Ruiz Espinosa Publicado: 21/09/2017 | 05:48 pm
General de Ejército Raúl Castro Ruz, Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros.
Compañeras y Compañeros de la Presidencia.
Distinguidos Invitados.
Trabajadoras y Trabajadores.
Compatriotas.
Este Primero de Mayo son más que suficientes las razones y argumentos que nos asisten a los trabajadores, junto a nuestro pueblo, para movilizarnos y desfilar en todas las plazas del país en bloques compactos, fluidos y combativos representando sus sindicatos para celebrar con júbilo, compromiso y entusiasmo revolucionarios el día del proletariado mundial.
Esta actitud de la masa trabajadora, es un legado que se remonta a la acción y al pensamiento del Capitán de la Clase Obrera cubana Lázaro Peña, cuyo ejemplo y sabiduría también nos acompañan al conmemorar este año el 40 Aniversario de su desaparición física. Del mismo modo rendimos merecido homenaje y reconocimiento a quienes más se destacan en el cotidiano desempeño de su labor.
La reciente realización del XX Congreso de la Central de Trabajadores de Cuba, efectuado en el marco de la celebración del 75 Aniversario de su fundación, trazó pautas para el desarrollo de su labor y enmarcó con precisión los objetivos que hoy se implementan, para representar los intereses de los trabajadores y organizarlos en un escenario laboral cuyas relaciones y composición se modifican, en correspondencia con las transformaciones que tienen lugar en el país.
Las tareas económicas y sociales que enfrentamos son cada día más complejas y difíciles, para alcanzar su cumplimiento será definitorio y trascendente el respaldo mayoritario de una clase obrera como la nuestra, forjada en la lucha; por ello, desatar y acrecentar la reserva de eficiencia, de productividad, de ahorro, la disciplina y el control, constituye la única y más duradera garantía para preservar nuestras conquistas sociales y construir un socialismo próspero y sostenible.
La presencia masiva de los trabajadores junto a nuestro pueblo en las plazas y avenidas, es expresión de reafirmación de esa voluntad, constituye el más genuino mensaje al mundo de nuestra unidad y respaldo inquebrantables a la Revolución, a Fidel y Raúl y ratifica la plena convicción de continuar defendiendo una patria libre y soberana.
Cubanas y cubanos:
No es posible olvidarnos que vivimos en un mundo bajo un orden internacional injusto y excluyente donde continúan las amenazas a la paz y la injerencia externa, con una larga historia de intervenciones, invasiones militares y golpes de estado orquestados por un poder imperial que no renuncia a cambiar el curso de la historia, ahora también mediante el empleo de métodos más sofisticados y encubiertos para dividir y subvertir.
Por eso esta multitudinaria fiesta del Primero de Mayo, es también una contundente expresión de nuestro respaldo y reconocimiento al proceso de integración regional que, como necesidad insoslayable para su supervivencia y desarrollo, se consolida entre los pueblos latinoamericanos y caribeños.
Hacemos patente nuestro pleno respaldo a la Revolución Bolivariana-Chavista y a su Presidente Constitucional Nicolás Maduro, ante las acciones desestabilizadoras de la derecha reaccionaria.
Igualmente condenamos de manera enérgica al genocida bloqueo económico, comercial y financiero impuesto contra nuestro pueblo por el gobierno de los Estados Unidos, que en arrogante actitud desconoce el rechazo casi absoluto de la comunidad internacional hacia este cerco criminal.
Con la felicidad que nos alberga por tener a René y a Fernando en suelo patrio luego de cumplir con sus largas e injustas condenas, nos comprometemos también, en este Día Internacional de los Trabajadores, a intensificar las acciones de movilización y de reclamo por el regreso de Gerardo, Antonio y Ramón, nuestros Héroes prisioneros en cárceles del imperio por combatir al terrorismo contra Cuba.
Agradecemos la presencia esta mañana con nosotros de centenares de amigos sindicalistas, de movimientos sociales de diversas latitudes y manifestamos el testimonio de nuestro mensaje de solidaridad y compromiso militante con los trabajadores que en el mundo son víctimas de las crisis económicas, y sufren brutal represión por reclamar sus más elementales derechos.
Por todas estas razones, hagamos resonar el paso firme del pueblo cubano en las plazas y avenidas del país, enarbolando nuestras consignas revolucionarias, hasta hacer vibrar las más profundas raíces de la nación, en este gran desfile proletario y socialista que hará temblar la tierra.
¡Adelante, marchemos unidos al combate!
¡Viva la Revolución!
¡Vivan Fidel y Raúl!
¡Vivan los trabajadores!