Georgina Barreiro Fajardo, ministra de Finanzas y Precios. Foto: Juan Moreno General de Ejército Raúl Castro Ruz, Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros,
Compañero Ricardo Alarcón de Quesada, Presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular,
Distinguidos invitados,
Compañeras y compañeros diputados:
Estamos a pocas horas de finalizar un año que pasará a la historia como el año en el que se ha desatado la mayor y más profunda crisis económica de los últimos 70 años.
Nuestro país se vio enfrentado a grandes retos para continuar llevando adelante los programas de desarrollo económico y social. La economía sufre no solo los impactos de la crisis mundial, sino además, las afectaciones que ocasionan el criminal e injusto bloqueo del gobierno de los Estados Unidos, así como el paso de los tres recientes huracanes, representando solo estos últimos, pérdidas cercanas a los 10 mil millones de dólares.
Todos estos elementos han incidido de una u otra forma en la ejecución del Presupuesto del Estado del año 2008.
Aunque se estima en relación al plan un crecimiento en los ingresos en un 5,6%, estos son insuficientes para cubrir el crecimiento de los gastos, los que aumentan en un 9%.
Por ello, fue necesario que el Consejo de Estado, en cumplimiento de lo establecido en la Ley del Presupuesto, aprobara el aumento del déficit fijado para este año en un importe no mayor a mil 626 millones de pesos, lo que determina un déficit de 4 mil 200 millones de pesos que representa un 6,7% del Producto Interno Bruto esperado.
El hecho de que el déficit real sea superior al aprobado, es una consecuencia de las condiciones complejas en las que se desarrolló la economía, lo que obligó a una sistemática valoración de los indicadores macroeconómicos y a un manejo disciplinado de las finanzas internas.
Nuestro país destina todos sus recursos al sostenimiento y desarrollo económico y social, distribuyendo los mismos de forma tal que garanticen la justicia social y la igualdad de oportunidades para todo nuestro pueblo. No aplicaremos como variante las recetas que imponen los principales organismos financieros internacionales dirigidas a eliminar los programas sociales que garanticen el acceso a la educación, a la salud, a la seguridad y a la asistencia social y otros que permiten el desarrollo integral del ser humano.
Dando cumplimiento a la política de proteger a los sectores más vulnerables de nuestra población, como se informó el pasado mes de mayo, se decidió aumentar la pensión mínima a los jubilados y la prestación mínima a los asistenciados, representando un incremento del gasto para un año de 810 millones de pesos. Ello elevó la pensión mínima de los jubilados a 200 pesos y la prestación mínima a los asistenciados a 147 pesos.
Por otra parte, el aumento por encima de lo planificado, durante la mayor parte del año, en los precios de importación o de acopio a productores nacionales de los alimentos que se destinan a la población por la vía normada o del consumo social, así como del precio del combustible, representaron incrementos en los niveles de gasto en relación al plan en el entorno de 650 y 800 millones de pesos, respectivamente.
Fue necesario destinar más de 300 millones de pesos a financiar en el sistema empresarial parte de las pérdidas ocasionadas por los huracanes, fundamentalmente en el sector agrícola. Esta cifra no representa el impacto total en el Presupuesto del Estado, ya que una parte significativa fue asimilada por los recursos propios de las empresas y el sistema de seguro.
De igual forma se designaron importantes recursos para restablecer, de forma rápida, después del paso de los huracanes, los servicios de salud y de educación a la población.
Hasta aquí los principales elementos que incidieron en la ejecución del Presupuesto del Estado de este año 2008, que aunque determinan un mayor déficit al aprobado, está en correspondencia con las condiciones en que el país se vio obligado a respaldar el plan económico y social para el año.
Compañeras y compañeros:
Corresponde ahora presentar las cifras para el próximo año, las que fueron previamente analizadas por las comisiones de trabajo que conforman esta Asamblea. Los diputados recibieron, además, un informe que desglosa en detalle los ingresos y los gastos que se proponen, lo que me permite realizar una caracterización más general del proyecto de Presupuesto del Estado que se presenta para su aprobación.
Para el año próximo se pronostica un escenario internacional aún más complicado que el actual, dada la profundización de la crisis mundial, sin lograrse aún determinar su alcance total.
A partir de estimarse un crecimiento de la economía inferior a los alcanzados en los últimos años, el proyecto que se presenta considera incrementos imprescindibles en los gastos del Presupuesto del Estado, con el objetivo de proyectar un déficit que contribuya al equilibrio de las finanzas internas.
Se planifican ingresos por más de 43 mil 700 millones de pesos, lo que representa un crecimiento de un 4% con relación al presente año y está en correspondencia con los niveles de crecimiento de la economía.
Se requiere mantener una atención permanente a los niveles de bienes y servicios que se venden a la población para garantizar los incrementos necesarios y sostenidos que contribuyan a equilibrar los niveles de liquidez en manos de la población.
Se planifican gastos por más de 47 mil 500 millones de pesos, lo que representa un crecimiento de un 2,9% en relación al estimado de cierre del 2008. Debe ser un objetivo a mantener en los próximos años que el incremento de los ingresos sea superior al crecimiento de los gastos, a partir de producir bienes y servicios con elevada eficiencia y calidad y mantener un control más riguroso sobre los gastos.
Para la actividad presupuestada se proyectan gastos por alrededor de 32 mil 900 millones de pesos, lo que constituye un crecimiento de un 3,9%. Este crecimiento es significativamente inferior a lo planificado en años anteriores, siendo necesario identificar por cada unidad presupuestada los niveles de reserva existentes, con el fin de continuar brindando los servicios correspondientes, estableciendo las prioridades necesarias y sin demandar recursos adicionales.
Dentro de la actividad presupuestada más del 63% de los recursos se destinan a los sectores de Educación, Salud, Seguridad y Asistencia Social. Los fondos reservados solo para estos sectores representan un 43,6% del total de los gastos del Presupuesto del Estado y un 30,2% del Producto Interno Bruto a precios corrientes planificado para el año 2009.
Se destinan importantes recursos a otros sectores que también impactan en la calidad de vida de la población y en el desarrollo del país, como son la Cultura y el Arte, el Deporte, los Servicios Comunales, así como el relacionado con la Ciencia, la Tecnología y el Medio Ambiente.
En el Presupuesto se han considerado los recursos necesarios para mantener y desarrollar la capacidad combativa y las reservas materiales que garanticen los requerimientos de la defensa del país y la preservación del orden interior.
A partir de este año se establecieron normas de gasto para un grupo de actividades presupuestadas. Esta medida es una herramienta importante para avanzar en el objetivo de lograr un mejor control y uso de los cuantiosos recursos que el país destina a estos sectores. Las verificaciones y auditorías que se realizan muestran en un elevado por ciento resultados deficientes, existiendo condiciones que propician el descontrol y el robo de los recursos asignados.
Para el sistema empresarial se destinan 8 mil 490 millones de pesos, cifra solo ligeramente inferior al estimado para este año.
Dentro de las transferencias al sector empresarial se destaca la que se realiza para mantener la venta a la población de los productos de la canasta básica a precios por debajo del costo de producción y venta, la que asciende a mil 600 millones de pesos. En los últimos cinco años el país ha requerido incrementar en más de tres veces el monto de esta transferencia, a partir de los aumentos de los precios de importación de alimentos y de acopio interno a los productores, manteniendo los mismos precios de venta a la población. Debo señalar que el impacto de estos subsidios es aún mayor si consideramos que el costo en divisas para el país de la canasta básica está en el entorno de los mil 300 millones de dólares.
Se identifican otras transferencias que permiten respaldar en el sistema empresarial aquellas actividades que generan, por decisiones estatales, gastos en las empresas, así como para estimular las producciones agropecuarias.
Se han reservado 700 millones de pesos para el subsidio por pérdidas en empresas irrentables, las cuales serán financiadas solo en las magnitudes mínimas que permitan su funcionamiento y estimule la búsqueda de la eficiencia necesaria en la empresa socialista, a partir del análisis que se realice caso a caso en el Comité de Evaluación de Beneficios Financieros. Aunque la cifra aún es elevada, representa una disminución del 29% en relación al estimado para el presente año.
Para respaldar el proceso inversionista que se financia por el Presupuesto se planifican 2 mil 935 millones de pesos, dando continuidad a los programas vinculados fundamentalmente a la construcción de viviendas, obras de la salud, y al desarrollo de la infraestructura energética, hidráulica y del transporte.
Se consideró conveniente planificar para el año próximo, al igual que en años anteriores, una provisión para enfrentar posibles desastres naturales, destinando para este fin 200 millones de pesos.
El balance de ingresos y gastos estimado para el año 2009 refleja un déficit de 3 mil 842 millones de pesos, equivalente al 5,6 % del Producto Interno Bruto planificado para dicho año. El déficit que se presenta es inferior en un 1,1% al estimado para el 2008, por lo que se considera razonable, valorando las condiciones objetivas en que se dará continuidad al desarrollo económico y social en el año 2009.
Compañeras y compañeros:
El control sobre el destino y el uso adecuado de los recursos presupuestarios, deberá constituir uno de los instrumentos fundamentales para alcanzar los objetivos trazados. Estamos convencidos de que podemos demandar menos recursos, si eliminamos, entre otros, los vicios negativos del despilfarro y el descontrol.
Los organismos y consejos de la Administración deben controlar sistemáticamente tanto los niveles de gasto como los aportes que deben realizar sus entidades al Presupuesto del Estado.
Debemos eliminar de nuestro actuar la nociva práctica de gastar y después solicitar los recursos requeridos. Cada administrador de Presupuesto tiene la obligación de administrar y controlar los recursos asignados, buscando la mayor racionalidad en correspondencia con la situación que el país enfrenta.
Las reuniones periódicas en los colectivos laborales para discutir el Presupuesto y controlar la ejecución de lo aprobado deben ser una importante herramienta para alcanzar estos objetivos y debemos exigir que las administraciones brinden los elementos que permitan alcanzar los mismos.
Recordemos que los gastos que realicemos tienen que tener un respaldo en bienes y servicios generados con calidad y eficiencia.
Habrá que proponer las modificaciones a la política tributaria existente para aplicar un sistema de impuestos y contribuciones adecuado a las condiciones actuales de la economía.
Por otra parte, existe hoy un nivel de gratuidades indebidas y altamente subsidiadas que están por encima de las posibilidades económicas del país. Este problema deberá ser abordado de forma gradual y sostenida.
Considerando los elementos expuestos, solicito a esta Asamblea la aprobación del Presupuesto del Estado para el año 2009.
En vísperas de celebrar el 50 Aniversario del Triunfo de la Revolución, trabajemos para avanzar en el perfeccionamiento y consolidación de nuestra hermosa obra. Aún y cuando existen insatisfacciones, no debemos ni por un segundo olvidar, que los indicadores sociales que Cuba alcanza, como resultado de esta Revolución, son impensables para muchos países en el mundo.
Trabajando duro, unidos junto al Partido y bajo la guía de Fidel y Raúl, avanzaremos y venceremos.
Muchas gracias