Un respetuoso saludo a Fidel y una crítica al bloqueo de EE.UU. contra nuestro país, fueron expresados este lunes por el Cardenal Tarcisio Bertone, secretario de Estado de Su Santidad el Papa Benedicto XVI, en conferencia de prensa conjunta con el ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Felipe Pérez Roque.
A una pregunta de JR sobre sus expectativas acerca de su encuentro con el Presidente Raúl Castro Ruz (previsto para este martes), Su Eminencia previó un diálogo «de claridad y sinceridad».
Aprovechó además la oportunidad para enviar «un respetuoso saludo» al compañero Fidel, con quien, recordó, habló en 2005 sobre Juan Pablo II, la Madre Teresa de Calcuta y el actual Pontífice, Benedicto XVI, y apuntó que tanto la Iglesia Católica cubana como las autoridades esperan que pueda concretarse una visita del Papa a nuestro país.
De igual modo, el Cardenal Bertone calificó de excelentes las relaciones de la Santa Sede con las autoridades cubanas, quienes le han brindado toda la ayuda necesaria durante los tres viajes que ha efectuado a la Isla, y con las que conversó muy ampliamente en esta ocasión.
De igual modo expresó que «la Santa Sede confirma exactamente las palabras de Juan Pablo II acerca del que el bloqueo es injusto y éticamente inaceptable, es un opresión contra el pueblo cubano (...) Esa es la verdad. El Vaticano confirma ese juicio y hace tentativas de impulsar a los EE.UU. a eliminar este bloqueo».
Por su parte, el canciller Pérez Roque manifestó la satisfacción del gobierno y el pueblo cubanos por la presencia en la Isla del Cardenal Bertone, como portador de un mensaje del Papa Benedicto XVI, como expresión de las relaciones cordiales y respetuosas entre la Santa Sede y Cuba, e informó sobre la reunión sostenida minutos antes con el distinguido visitante, en la que se pudieron constatar las coincidencias fundamentales en temas de la agenda internacional.
Asimismo, subrayó la manera en que el pueblo cubano recibió, en el momento de la enfermedad de Fidel, el llamado de los obispos cubanos a los fieles católicos a la oración por su salud y su recuperación, «un gesto humano, que nuestro pueblo ha reconocido».