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Foto: Calixto N. LLanes El compromiso de la capital de concluir este año con toda su área agrícola cultivable en explotación, ya sea produciendo o reforestada —tarea conocida como Misión al 2007—, se encuentra al 92 por ciento de cumplimiento, informó en rueda de prensa Alberto Reyes, funcionario de la delegación provincial de la agricultura.
«Nos hemos propuesto terminar lo fundamental para el 26 de julio, y así poder contar con el resto del año para perfeccionar y mejorar lo que hemos logrado.
«Quedan aún 2 867 hectáreas ociosas, en las que se incluyen parcelas menores de 800 metros y patios de viviendas. El objetivo fundamental es ponerlas en explotación, bien con la siembra de cultivos varios o dedicándolas a la cría de ganado mayor o menor, y junto con eso preparar áreas para reforestarlas a partir de que rompan las lluvias».
Según explicó el experto, otra de las líneas de trabajo es darle imagen a la misión. Para ello hay que limpiar de hierbas y malezas y reforestar las áreas exteriores de las fincas, los espacios vacíos y vertederos que existen en los pueblos, y las entradas de las avenidas principales que dan acceso a la ciudad.
«Otra labor importante —añadió— incluye crear las condiciones para la continuidad de la explotación de las áreas agrícolas después que concluya la misión.
«Esto se hará mediante la creación de fincas estatales. Ellas serán el eslabón principal de la producción agropecuaria en la capital, con hombres que vivan allí con sus familias, en casas que ya se están construyendo, y con un sistema de estímulo que asegure su permanencia. Así se evitará que la tierra vuelva a quedar vacía, como ha sucedido en otras ocasiones».
