Varias hormonas esenciales para el crecimiento y otras sustancias bioactivas de gran impacto para los mecanismos nerviosos del bebé, el control del dolor y sus defensas inmunológicas, hacen de la leche humana un alimento insustituible
Según investigaciones de la Universidad de Turín, Italia, la leche materna contiene leptina, grelina y adiponectina, esenciales para el crecimiento adecuado del bebé neonato y el control de su peso, además de tener efecto en la regulación energética del individuo para toda la vida.
Estas hormonas, y otras sustancias bioactivas de gran impacto para los mecanismos nerviosos del bebé, el control del dolor y sus defensas inmunológicas, hacen de la leche humana un alimento insustituible, como lo son también los lazos cognitivos y afectivos que se establecen entre la madre y la criatura durante el amamantamiento.
Ninguna fórmula artificial de leche de las que se comercializan actualmente incorpora esas propiedades.