Los diamantes así obtenidos son casi idénticos a los naturales, pero su tamaño se mide en diezmilésimas de milímetro, por lo que para observarlos es necesario utilizar un microscopio electrónico
La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) trabaja en la extracción de diamantes del tequila para confeccionar las ultradelgadas películas de ese mineral que demanda la industria para recubrir objetos sometidos a agresiones del entorno (fricción, corrosión, oxidación) y disminuir su desgaste, sobre todo herramientas de corte como bisturís y brocas, dispositivos electrónicos y equipos médicos como prótesis, válvulas del corazón, piezas de recambio para las articulaciones y otras herramientas.
El equipo de físicos mexicanos probó primero a crear diamantes a partir de gases, y luego de líquidos con un alto contenido de carbono e hidrógeno como la cetona, el etanol y el metanol, hasta llegar a la famosa bebida mexicana. Los diamantes así obtenidos son casi idénticos a los naturales, pero su tamaño se mide en diezmilésimas de milímetro, por lo que para observarlos es necesario utilizar un microscopio electrónico.
Otra manera de obtener diamantes artificiales es a partir de cadáveres humanos. Una empresa suiza ha puesto de moda esa forma de «conservar» al ser querido tras un costoso proceso físico y químico que convierte el carbono de los restos humanos en grafito y luego lo hornea a 1 700 grados en un plazo de seis semanas. Cada persona puede «rendir» unos cinco o seis diamantes en colores que van del azul oscuro al blanco, y el precio, aunque elevado, puede ser menor que el de un servicio funerario de lujo en Europa.
Un equipo de la Universidad de Baylor, en Estados Unidos, formuló el uso de cáscaras de coco moldeadas por compresión para fabricar el revestimiento de maleteros, suelos y cubiertas interiores de puertas de automóviles.
Este es un proceso de conformado de piezas a partir de aplicar presión y calor a cualquier polímero (compuesto de varias moléculas) hasta que adopta la forma del molde en que se le introduce. Las fibras de coco han resultado tan buenas o más que las fibras de poliéster usadas hoy en la fabricación de coches, con la ventaja de que no arde bien ni genera humo tóxico.
Fuentes: Cnnexpansion, www.algordanza.org, Tendencias Tecnológicas
Palabra de hoy: Conocer algo es haber logrado las respuestas al qué, cuándo, cómo, y por qué de ese algo.
Sócrates
21
