Carlos Esquivel (Elia, Las Tunas, 1968) Poeta y narrador. Ha obtenido significativos premios en concursos nacionales e internacionales. Ha publicado, entre otros, Balada de los perros oscuros, El boulevard de los Capuchinos y Bala de cañón. Los poemas que publicamos hoy pertenecen a Los hijos del Kamikaze (Letras Cubanas, 2008).
Prímulas Cada cual tiene un New Jersey encima o lo que es lo mismo, pesa sobre la espalda, recuerda un olor. Cada cual ha descubierto que prosperar es vivir en Camagüey. Yo era desigual por dentro, no me identificaba, mi negocio era dejarme matar. Que eso era la demencia o no lo era. A veces yo volvía a mi madre, a veces recapaba en la industria, como tenía vanidad, como mamá me achacaba los miedos. No me vieron resistir hasta el fondo, no me vieron con tenazas por algo djajaistinto a no impulsar el perro. Me han contraído sin comprender, porque yo raspaba con un abrigo, o porque yo era desigual por dentro, no me identificaba, mi negocio era dejarme matar.Lámina junto al Ebro Antes de aparecer el fantasma de Francois Villon yo era un hombre honrado, creía comestibles aun los desperdicios cortados por la resignación de mi especie, tenía dos mujeres y no amaba a ninguna, vivía de negocios turbulentos vendiendo mi país todas las noches al primero que comprara. Hasta donde supe Francois Villon había sido ajusticiado y, quizás, escucho el gemido de su crimen en el fuego. Yo sonreía y era triste. Entonces tocó a la puerta y flotaba. Me dijo, ¿quieres comprar?. Yo era un hombre honrado, aun creía comestibles los desperdicios cortados por la resignación de mi especie, tenía dos mujeres y no amaba a ninguna.