El Cristo de La Habana fue inaugurado en diciembre de 1958 en las alturas de Casablanca. Realizada en mármol de Carrara por Jilma Madera, se halla entre las más importantes reproducciones escultóricas de Jesús que se han concebido en el mundo
En diciembre de 1958 fue inaugurado el Cristo de La Habana, en las alturas de Casablanca. Realizada en mármol de Carrara por Jilma Madera, se halla entre las más importantes reproducciones escultóricas de Jesús que se han concebido en el mundo.
A principios de 1959 un rayo la fulminó y le arranacó la parte posterior de la cabeza. Fue reparada, pero volvió a quedar dañada en el mismo sitio, por lo que se buscó la solución de colocar un pararrayos en la parte trasera del monumento.