Luego de tan extensa lista de premiados, que habla por sí sola de la calidad de este grupo de periodistas, algunos de ellos multipremiados en otras ediciones de este prestigioso Concurso 26 de Julio, se imponen unas breves palabras de reconocimiento y felicitación, reconocer el arduo trabajo del Jurado y, por supuesto, dar las congratulaciones para los colegas destacados.
Estamos en tiempos difíciles, para el mundo —nadie lo duda y a todos preocupa. Y para Cuba…
Por consiguiente, también son tiempos de crear, de trabajar, de atemperar el carácter y de crecerse. La muestra de más de 600 materiales presentados por periodistas, fotógrafos, diseñadores e ilustradores, dice mucho a favor de nuestro gremio.
A pesar de las dificultades y de las incomprensiones de humanos, aun con las carencias materiales, la falta de transporte o de los equipos quizá obsoletos por edad en un mundo cibernético de increíbles velocidades, nada ha sido un valladar, ni han podido frenar el talento y las ganas de hacer con una mirada aguda ante los problemas o frente a todo aquello que intenta dificultar el desarrollo del país.
Visualizar, escuchar, leer esos centenares de trabajos nos permite conocer cómo anda el país, a qué se enfrenta, cómo se sortean piedras en el camino, cuáles pueden ser las argucias con que tratan de engañar a ingenuos o asentar las malas intenciones que acechan en las nuevas coyunturas.
Estamos en una batalla, y los periodistas, los que sentimos esta profesión como un oficio de razón y corazón, no abandonamos nuestras armas. Los temas abordados por los premiados y por los que enviaron sus también buenos trabajos, dan cuenta de que este ejército de las ideas conoce el campo del enfrentamiento y está en pie de lucha con la misma lealtad de siempre, no importa a cuál generación pertenezca. La juventud de las ideas prevalece: ¿acaso no estamos celebrando una juventud de 90 años que lleva un PERIODISTA llamado FIDEL?
«Sólo quien sabe de periodismo, y de lo costoso del desinterés, puede estimar de veras la energía, la tenacidad, los sacrificios, la prudencia, la fuerza de carácter que revela la aparición de un diario honrado y libre», señaló el paradigma del periodismo cubano, José Martí. Esos diarios solo pueden ser hechos por estos periodistas y estamos hablando de conciencia, dignidad y honor de cubanos revolucionarios.
Entonces, sigamos sus ejemplos, escribiendo, hablando, plasmando imágenes con la seducción y la explicación, para hacernos mejores y mejorar a todos, guerreando desde la utilidad, la elegancia, la oportunidad y la valentía que requiere este cetro que se nos entregó y al que entregamos la vida: el periodismo.
Muchas gracias.
(*) Palabras pronunciadas, a modo de clausura, este jueves, en el acto de entrega de los premios y menciones del Concurso Nacional de Periodismo 26 de Julio, en su edición de 2016