Rodrigo Malmierca Díaz, ministro cubano del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, destacó las excelentes relaciones entre la Mayor de las Antillas y Argelia. Foto: Estudios Revolución Autor: Estudios Revolución Publicado: 18/10/2022 | 11:05 pm
Seis décadas han servido para estrechar y desarrollar las relaciones políticas, que hoy son excelentes, y también para fomentar los vínculos económicos y de cooperación ente Cuba y Argelia, señaló Rodrigo Malmierca Díaz, ministro del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, durante el acto por el aniversario 60 del establecimiento de las relaciones diplomáticas entre ambas naciones.
En el emblemático salón Portocarrero del Palacio de la Revolución, testigo de tantos momentos importantes para Cuba, tuvo lugar en la tarde de este martes la celebración, encabezada por el Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez.
Fue un espacio para el homenaje y también para el agradecimiento por el apoyo que se han brindado ambos pueblos y gobiernos en momentos difíciles y extraordinarios. Este martes tampoco faltó el reconocimiento a todo el impulso que dieron al fomento de las relaciones bilaterales en diferentes momentos Fidel, Raúl, el Che y los entrañables amigos Houari Boumedienne y Abdelaziz Bouteflika, presidentes del hermano país magrebí.
Ambas naciones, dijo Malmierca Díaz, hemos compartido procesos sociales de carácter popular y antimperialistas.
De historia, acompañamiento, cooperación y los muchos principios que nos unen, habló también el Ministro del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, quien enfatizó en que «estos son tiempos de actuar con unidad, cohesión, creatividad y solidaridad en defensa de nuestros intereses colectivos».
Las relaciones entre la hermana República Argelina Democrática y Popular y Cuba constituyen un ejemplo incuestionable de amistad, cooperación, solidaridad y de los estrechos vínculos entre ambos pueblos y gobiernos, así como entre sus principales dirigentes, comentó.
Inevitable en sus palabras resultó recordar el envío, en mayo de 1963, de la primera brigada médica internacionalista cubana al exterior, cuyo destino fue precisamente Argelia. Iniciaba así un largo y fecundo camino para Cuba en su propósito de compartir con países hermanos sus profesionales y saberes en pos de la salud de los pueblos.
En «la heroica y luchadora Argelia», como la calificara en el 2001 Fidel, más de 900 colaboradores cubanos brindan sus servicios actualmente en especialidades como oncología y urología, así como en la atención materno-infantil. Son acciones fruto de la amistad y solidaridad que en estas seis décadas se han fortalecido, entrelazando de muchas maneras nuestra historia.
En nombre de Cuba, el Ministro del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera agradeció al pueblo y gobiernos argelinos por la postura asumida en los foros internacionales en rechazo al genocida y criminal bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por la administración norteamericana a la Mayor de las Antillas.
A los amigos magrebíes Malmierca Díaz aseguró que Cuba continuará brindando su modesta contribución a pesar de las complejidades. «Lo hacemos —aseveró— con la profunda convicción de que la solidaridad no es una opción, sino una necesidad».
En la conmemoración —también presidida por el Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz; el canciller Bruno Rodríguez Parrilla, y el ministro de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, general de Cuerpo de Ejército Álvaro López Miera, todos miembros del Buró Político; así como por el Comandante del Ejército Rebelde José Ramón Machado Ventura, y el vice primer ministro Ricardo Cabrisas Ruiz—, el embajador argelino en la Isla, Abdelkrim Benchiach, reconoció que el apoyo y el respaldo de Cuba han permitido a varios pueblos recobrar su independencia, asegurar su soberanía y construir sus países.
De manera especial, felicitó a la Mayor de las Antillas por su elección a la Presidencia del Grupo de los 77 más China para el año 2023. Se trata, apuntó, de un merecido reconocimiento a la acción que Cuba siempre ha llevado a cabo a favor de los países en desarrollo.
Tras recordar aquella histórica jornada del 17 de octubre de 1962, fecha en que se establecieron las relaciones diplomáticas entre ambas naciones, el Embajador argelino reconoció los excelentes nexos políticos que las distinguen, y que cada día se consolidan «mediante una cooperación multiforme y una fructífera concertación en los temas de interés para los dos países, esencialmente en la esfera de la salud, que es una viva muestra de ello».