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BOGOTÁ, septiembre 30.— El partido político Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC) rechazó las declaraciones del presidente de Colombia, Iván Duque, sobre Cuba, y destacó que el Gobierno de La Habana ha sido fundamental en la construcción de la paz en el país sudamericano.
«El Gobierno de Cuba ha sido fundamental para la construcción de la paz de Colombia y del mundo. Gracias a la cooperación de esta nación y de los demás países garantes y acompañantes se pudo firmar el Acuerdo de La Habana», indicó.
«Cuba blindó de confianza un proceso nada fácil en donde las partes enfrentadas en un conflicto armado de más de 50 años pudieron conversar y sacar adelante unos acuerdos para el bienestar de los colombianos y colombianas», sostuvo FARC.
En un comunicado, el consejo político de la FARC afirmó que «no es sensato atacar a un país que defiende la paz y, además, seguir incumpliendo compromisos con miles de personas que están en proceso de reincorporación».
«El Gobierno de Iván Duque, aliado del imperialismo y de las políticas injerencistas de Donald Trump, no puede seguir atacando a naciones soberanas y autónomas, ni puede seguir torpedeando los deseos de paz a nivel mundial», precisó el texto citado por Telesur.
Duque había manifestado que Cuba debía preguntarse si prefiere la relación con Colombia o con los criminales, haciendo referencia al Ejército de Liberación Nacional (ELN).
El partido político FARC aseguró que las declaraciones del presidente Duque y la postura del Gobierno frente a las relaciones diplomáticas con Cuba ponen en riesgo la estabilidad de la paz en Colombia y señalan que se trata de una amenaza del Ejecutivo.
«Insistimos en la necesidad de retomar los diálogos con el Ejército de Liberación Nacional y propiciar el sometimiento a la justicia de las estructuras armadas existentes que lo deseen hacer, con el fin de avanzar hacia una paz completa», apuntó.
El partido FARC expuso que los negociadores del ELN deben volver al lugar de origen con la protección de los protocolos que se firmaron, es decir, con apoyo del Gobierno y de los países garantes.
En noviembre de 2016, las entonces Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia y el Gobierno del presidente Juan Manuel Santos acordaron y firmaron un pacto que puso fin a un conflicto de más de medio siglo.
De acuerdo con dicho pacto, la insurgencia se convirtió en un partido político, y se les garantizaron puestos a sus candidatos en el Congreso, también se concedió amnistía para algunos tipos de delitos.
