Miguel Díaz-Canel expresó su pésame al exmandatario brasileño Luis Inacio Lula Da Silva por el fallecimiento de su nieto Arthur. Autor: Tomado de Internet Publicado: 02/03/2019 | 10:22 am
El Presidente Cubano, Miguel Díaz-Canel expresó hoy su pésame al exmandatario brasileño Luis Inacio Lula Da Silva por el fallecimiento de su nieto Arthur, de siete años, quien murió el viernes de meningitis meningocócica.
Díaz-Canel manifestó sus condolencias en las redes sociales, donde también reiteró la convocatoria a la lucha por la liberación del líder del Partido de los Trabajadores de Brasil.
«Acompañamos a @LulaOficial en su dolor. Todos a luchar por su liberación #LulaLibre», escribió en su cuenta en Twitter @DiazCanelB, y posteó además una publicación del canciller cubano, Bruno Rodríguez.
Anteriormente, el ministro de Relaciones Exteriores de la Isla también manifestó su solidaridad a Lula y ratificó el compromiso de la Isla con la causa por su excarcelación, quien la consideró una cuestión de justicia y llamó a la solidaridad internacional a favor del líder brasileño.
«En estos momentos de profundo dolor para el compañero @LulaOficial, reafirmamos nuestro compromiso con la lucha por su liberación. Convoquémonos todos. Unamos nuestros esfuerzos por este reclamo de justicia», publicó en su cuenta @BrunoRguezP.
Acompañamos a @LulaOficial en su dolor. Todos a luchar por su liberación #LulaLibre #SomosCuba #SomosContinuidad https://t.co/FCpgYEcxoi
— Miguel Díaz-Canel Bermúdez (@DiazCanelB) March 2, 2019
El fallecimiento del nieto de Lula, ocurrió el viernes en un hospital de Sao Paulo, el cual se unió a los hechos tristes que golpearon a la familia Da Silva; en enero el hermano de Lula, Genival Inacio da Silva, conocido como Vavá, murió como consecuencia de cáncer en el pulmón.
Desde abril, el exjefe de Estado permanece preso después de ser sancionado a 12 años y un mes de cárcel en segunda instancia, en un caso de presuntos hechos de corrupción, que expertos consideraron una injusticia cometida por razones políticas.
En febrero fue objeto de una segunda condena en la operación anticorrupción Lava Jato, esta vez a 12 años y 11 meses.