McConnell no pudo lograr los votos necesarios. Autor: Internet Publicado: 21/09/2017 | 06:59 pm
WASHINGTON, junio 27.— El liderazgo republicano del Senado fracasó en su plan para votar su reforma de salud esta semana, y se vio forzado a posponerlo debido a la oposición unánime no solo de los demócratas, sino de una revuelta de un puñado de miembros de su propio partido, dijo Notimex.
El líder de la mayoría, Mitch McConnell, aceptó que carece de los 50 votos necesarios para aprobar la versión republicana de la ley de salud, un día después de que la Oficina de Presupuesto del Congreso (CBO) reportó que dejaría sin cobertura médica a otras 22 millones de personas.
«Vamos a continuar las discusiones dentro de nuestra bancada sobre las diferencias que tenemos y que trataremos de litigar. Consecuentemente no moveremos la iniciativa esta semana pero seguimos buscando tener al menos 50 votos», reconoció McConnell.
A raíz del fracaso, el presidente Donald Trump invitó a los 52 miembros de la bancada republicana a la Casa Blanca, incluidos los cinco que rechazaron la propuesta: Ted Cruz, Rand Paul, Mike Lee, Ron Johnson y Dean Heller, quienes la rechazan por diferentes motivos.
El líder de la minoría demócrata, Chuck Schumer, dijo que no respaldan esa ley porque el proyecto favorece a los estadounidenses de mayor poder adquisitivo en desmedro del norteamericano medio, apuntó DPA.
El nuevo sistema, agrega Notimex, sustituye los subsidios directos del Obamacare por créditos fiscales para las personas de más bajos ingresos.
Asimismo, recorta la expansión del Medicaid, a pesar de que beneficia a los 74 millones de estadounidenses más pobres, incluidos ancianos, mujeres embarazadas y niños, agrega Notimex.
En contraste, el plan republicano conserva dos de los pilares del Obamacare: la cobertura para hijos menores a los 26 años y apoyo parcial a personas con enfermedades prexistentes.
A raíz de la posposición, el liderazgo demócrata del Senado consideró que la propuesta de los republicanos no puede ser corregida, pero se declararon dispuestos a enmendar algunos aspectos polémicos de la Ley de Salud Asequible, conocida como Obamacare.