Para Cuba, la No Alineación significa la lucha por modificar radicalmente el orden económico internacional impuesto por las grandes potencias Autor: Estudios Revolución Publicado: 21/09/2017 | 06:38 pm
ISLA DE MARGARITA, Venezuela.— «No puede subestimarse nuestra enorme fuerza cuando actuamos concertadamente», sentenció el General de Ejército Raúl Castro Ruz, Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, al intervenir este sábado en la XVII Cumbre del Movimiento de Países No Alineados.
En sus palabras, reiteró el rechazo de los pueblos de Nuestra América a los intentos de cambio de régimen y el llamado «a garantizar que todo país se abstuviera de recurrir a la agresión y al uso de la fuerza», realizado en la Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), celebrada en enero de 2014 en La Habana.
Sin embargo —dijo— somos testigos de los crecientes ataques a la soberanía y autodeterminación de Venezuela, a la que reiteró el apoyo irrestricto de la Isla: «Cuba reafirma su incondicional respaldo al Gobierno y al pueblo venezolanos, a la unión cívico-militar y al Presidente constitucional Nicolás Maduro».
Seguidamente, rechazó el golpe de Estado parlamentario-judicial contra la presidenta brasileña Dilma Rousseff, electa por el pueblo con más de 53 millones de votos. Asimismo, ratificó el acompañamiento a Colombia en la gestión de la paz definitiva y expresó confianza en que el pueblo de la República Árabe de Siria pueda solucionar sus diferencias por sí mismo y sin injerencias externas.
«Para Cuba, la No Alineación significa la lucha por modificar radicalmente el orden económico internacional impuesto por las grandes potencias, que ha conducido a que 360 personas posean una riqueza anual superior a los ingresos del 45 % de la población mundial».
Y agregó que «significa también la lucha por eliminar la brecha del conocimiento y por el uso de las tecnologías de la información y las comunicaciones en pro del desarrollo y la cooperación».
Al referirse a la decisión de restablecer las relaciones diplomáticas con Estados Unidos, señaló que nuestro país seguirá reclamando el levantamiento del bloqueo económico, comercial y financiero, que tantos daños y privaciones causa a Cuba y otras naciones, debido a su alcance extraterritorial. Igualmente, precisó que continuaremos demandando la devolución del territorio ilegalmente ocupado por la Base Naval de Estados Unidos en Guantánamo.
Insistió en la disposición al diálogo con Estados Unidos, pero sin renunciar a uno solo de nuestros principios, ni realizar concesiones inherentes a la soberanía e independencia cubanas.
Finalmente, deseó éxitos a Venezuela en la conducción de los No Alineados, al tiempo que felicitó a la República Islámica de Irán «por su labor en el mandato recién concluido».
Fortalecer la lucha por la paz mundial
La Conferencia de Jefes de Estado de la XVII Cumbre del Movimiento de Países No Alineados centra sus debates en el logro de la paz mundial.
En la sesión inaugural, este sábado, el presidente iraní Hasán Rohani aseveró que el esfuerzo de los países miembros resulta determinante para la solución de los retos actuales de un mundo en el que el mantenimiento de esa paz está cada vez más en riesgo.
Al convocar a elegir por aclamación al nuevo presidente del Movimiento y sellar el traspaso de mandato, el dignatario resaltó que la nación persa apoyará incondicionalmente al Gobierno de Nicolás Maduro en la conducción del organismo durante los próximos tres años.
El Presidente venezolano agradeció el honor de la investidura «en nombre del pueblo de Simón Bolívar y Hugo Chávez», y aseguró que «este mando será usado para la causa de nuestros pueblos».
En su intervención, definió como un deber del bloque «ir junto a Cuba hasta que veamos desmoronarse y podamos desmontar el bloqueo económico y financiero contra su pueblo», y anunció que promoverá iniciativas especiales para la lucha contra el terrorismo en todas sus formas y manifestaciones.
Denunció la arremetida imperialista contra su nación, a partir de la cual, dijo, se busca «socavar los avances y logros de la Revolución Bolivariana»; una arremetida que pretende imponer una reorganización «de la política, de la economía y la cultura de nuestros países con la vieja oligarquía», alertó.
Estas ideas fueron apoyadas por distintos oradores en la jornada sabatina.
Aún son muchos los objetivos sin alcanzar dentro del Movimiento, como el respeto a la soberanía internacional de los pueblos y a su autodeterminación e igualdad de derechos soberanos; sin embargo, resulta preocupante que los hechos que afectan esos preceptos fundamentales se agraven cada vez más en el escenario internacional.
En tal contexto, el Movimiento de Países No Alineados cobra una vigencia extraordinaria, al constituir un espacio vital para discutir no solo los asuntos de un país, sino los intereses comunes de sus miembros, que componen casi las dos terceras partes de la Organización de las Naciones Unidas.
Aprovechar sus enormes potencialidades es el mayor reto que tiene por delante el Movimiento.