Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

Por un mundo multipolar

El unilateralismo de la superpotencia estadounidense se va convirtiendo en vestigio del desequilibrio de poder que surgió tras la caída del bloque soviético

Autores:

Juana Carrasco Martín
Nyliam Vázquez García
José Luis Rodríguez*

Cada vez más, el mundo se parece menos al de la postguerra mundial. Los acontecimientos que hoy mismo se suceden en el Medio Oriente y otras regiones importantes desde un punto de vista geoestratégico, así como las formas de solucionarlos, evidencian el nacimiento y consolidación de un mundo multipolar, donde el unilateralismo de la superpotencia estadounidense se va convirtiendo en vestigio del desequilibrio de poder que surgió tras la caída del bloque soviético, y con él, el entierro de la bipolaridad.

Para restaurar ese equilibrio y salvar la gobernabilidad del sistema internacional, un grupo de naciones apuestan a la formación y consolidación de bloques regionales políticos y económicos que potencian el multilateralismo al servicio de un mundo  en el que ninguna nación ostente el predomino del poder por encima de otras.

Así ganan edad y sabiduría política grupos como la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), los Brics (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica), la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur), y la Alianza Bolivariana de los Países de Nuestra América (ALBA), entre otras con cada vez más peso a favor de la defensa de sus intereses en organismos internacionales como la ONU.

Con la crisis en Siria, Estados Unidos debe entender que su rol no es preponderante en el sistema internacional, aunque será difícil para una nación que aun en la etapa de la multipolaridad, continúa apelando a actos unilaterales de política exterior.

La mejor posición de esos bloques regionales para enfrentar la crisis económica y social que presentan otros que se las daban de poderosos, dice mucho de la necesidad de un nuevo orden mundial donde los intereses de la gente tengan prioridad frente a las ganancias de una ínfima porción que ahora acapara las mayores riquezas.

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