WASHINGTON, enero 18.— Estados Unidos está «completamente preparado» para cualquier enfrentamiento con Irán por el control del estratégico Estrecho de Ormuz, pero tiene esperanzas de que el litigio se resuelva pacíficamente, dijo este miércoles el secretario de Defensa, Leon Panetta.
«Obviamente, siempre seguimos con los preparativos para estar listos para cualquier contingencia, pero no estamos adoptando ninguna medida especial (...) porque estamos plenamente preparados para hacer frente a esa situación ahora mismo», dijo Panetta a la prensa.
Irán declaró el mes pasado que cerraría el Estrecho de Ormuz —por donde pasa la quinta parte del petróleo comercializado en el mundo— en caso de un ataque militar o un severo endurecimiento de las sanciones internacionales impuestas por Estados Unidos y las potencias occidentales, a su programa nuclear pacífico.
Las declaraciones incrementan la tensión bilateral porque Washington está reforzando su presencia naval en aguas cercanas al Golfo Pérsico, en respuesta a esa decisión iraní.
«Siempre hemos mantenido una muy fuerte presencia en esa región. Tenemos una flota naval localizada allí», resaltó Panetta, según AFP.
El jefe del Pentágono se ufanó belicosamente: «Tenemos presencia militar en esa región... para dejar bien claro que haremos todo lo que sea posible para ayudar a garantizar la paz en esa parte del mundo».
Panetta informó que la postergación de ejercicios militares conjuntos con Israel se acordó a pedido de su par israelí, Ehud Barak.
«El ministro Barak se comunicó conmigo e indicó que estaban interesados en posponer las maniobras», dijo.
El viernes, el diario New York Times, reportó, citando a funcionarios estadounidenses, que Washington utilizó un canal secreto para advertirle al supremo líder de Irán, el Ayatolá Ali Khamenei, que cerrar el estratégico pasaje marítimo significaría cruzar la «línea roja» y provocaría una respuesta.