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Los manifestantes han intentado bloquear las vías en la capital. Foto: AP PARÍS.— Francia hará una nueva oferta salarial a los sindicatos de la isla caribeña de Guadalupe, y el presidente Nicolas Sarkozy se comprometió a arreglar las cosas «en el terreno», en un intento por aquietar las violentas protestas que desde hace un mes mantienen paralizado ese territorio francés de ultramar.
El anuncio se conoce después de que esta semana un grupo de hombres armados mató a tiros a un líder sindical. Durante la noche del miércoles, hubo disparos contra las fuerzas de seguridad y la policía arrestó a unas 30 personas.
Los manifestantes reclaman un incremento de 200 euros (250 dólares) en el salario mínimo para poder lidiar con el alto costo de la vida en Guadalupe. Esta es una de las principales reivindicaciones del Colectivo contra la Explotación, el movimiento que lidera la huelga general que tiene paralizada a esa isla desde el 20 de enero, y a la que el 5 de febrero se unió la vecina Martinica.
Si bien el gobierno francés ha ofrecido numerosas concesiones a los manifestantes, hasta ahora ha sido reacio a acceder a un aumento salarial. El eventual acuerdo no implicaría bajar los impuestos a las empresas, pero sí allanaría el camino para la implementación de un nuevo beneficio para los trabajadores de menores ingresos y para los desempleados, dijo el ministro francés a cargo de los territorios de ultramar, Yves Jego.
«Vamos a intentar encontrar respuestas a problemas que son muy diferentes a los del continente», afirmó el primer ministro francés, François Fillon, y agregó que él personalmente podría viajar a Guadalupe de ser necesario para sellar el acuerdo.
Según AFP, el presidente francés, Nicolas Sarkozy, anunció este jueves una partida de 580 millones de euros para los departamentos de ultramar, inmersos en una grave crisis social, y llamó a la calma en Guadalupe.
Al día siguiente de la muerte del sindicalista guadalupeño, el jefe del Estado recibió en París a los cargos electos de los territorios ultramarinos, para tratar de calmar una situación que se degrada día a día.
Sarkozy anunció que se desplazará a Guadalupe «cuando regrese la calma» para celebrar un debate sobre la situación. Los territorios de ultramar franceses acumulan males sociales como el elevado precio de los productos de gran consumo, en su mayor parte importados desde la metrópoli, y un desempleo que sobrepasa el 20 por ciento.
