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WASHINGTON.— Mientras la recesión económica se asoma esta semana, con depreciaciones colosales de bancos neoyorquinos sacudidos por la crisis inmobiliaria, y un desplome en las bolsas mundiales, el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, pidió el viernes al Congreso que apruebe «lo antes posible» un plan temporal para reactivar la economía del país.
Bush solicitó que el plan incluya reducciones de impuestos para los ciudadanos e incentivos a la inversión para las empresas, «incluidas las pequeñas», al tiempo que enfatizó que debe ser temporal y rápido, y lo cifró en el uno por ciento del PIB del país, informó AFP.
Según explicó el secretario del Tesoro, Henry Paulson, la cantidad concreta del plan debe oscilar entre los 140 000 y los 150 000 millones de dólares, reportó la DPA.
Apoyado en las opiniones de expertos, Bush aseguró que la economía tiene «una base sólida», aunque también reconoció que existen «áreas de preocupación real».
El anuncio se produce un día después de que el presidente de la Reserva Federal (FED), Ben Bernanke, advirtiera sobre la necesidad de adoptar medidas urgentes e inyectar dinero para estimular la economía, anunció la BBC.
Aunque el titular de la FED negó que la mayor economía del mundo haya entrado en recesión, el fenómeno ya se está registrando en varios estados del país.
Así lo demuestran las declaraciones de Alan Greenspan, ex presidente de la FED, en la entrevista concedida este jueves al diario The Wall Street Journal, donde afirmó que la economía de Estados Unidos probablemente entrará en recesión, si es que ya no lo está, informó AFP.
