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Sobre las víctimas de la violencia o el hambre lucran las empresas. Foto: AFP Naciones Unidas, Diciembre 24.— El departamento de Auditoria de la ONU es llamado este martes a investigar irregularidades económicas en el proceso de despliegue de una misión de paz en Darfur, luego de denuncias que refieren que una compañía privada estadounidense, no identificada, había recibido de manera ilegal un contrato para la construcción de campamentos en esa región sudanesa.
Según informó PL, las versiones sobre esas pesquisas comenzaron a cobrar fuerza el pasado sábado, cuando se anunció que la Comisión de Presupuesto de la Asamblea General había destinado un millón 200 000 dólares para un año de operaciones en esa provincia del oeste sudanés.
De acuerdo con lo previsto, destacó PL, más de 26 000 efectivos de la UNAMID —contingente mixto formado por la ONU y la Unión Africana (UA)— comenzarán a arribar a Darfur en las próximas dos semanas para contener la violencia desatada por el enfrentamiento que desde 2003 mantienen fuerzas rebeldes y tropas del gobierno, y que incluye además enfrentamientos tribales y bandidaje.
Las denuncias apuntan que en la concesión de dicho contrato a la empresa norteamericana, participó personal del propio Secretariado de la ONU, sin someterlo a licitación, con el objetivo de beneficiar a la compañía, cuya identidad hasta ayer no ha sido identificada, reportó PL.
Igualmente precisa que según versiones de prensa que citan al embajador de Sudán ante la ONU, Abdel Mohamoud Abdel Halim, la Asamblea General denunció al Secretariado del organismo por este caso, durante la aprobación del presupuesto para las operaciones de la UNAMID en Darfur.
Las versiones sobre la presunta intención de beneficiar a esta empresa estadounidense de servicios logísticos ocurre poco después de que el enviado especial de la Casa Blanca para Darfur, Andrew Natsios, renunciara el viernes pasado, informó PL.
Reportes de la prensa estadounidense destacan que la renuncia del también profesor de la Universidad de Georgetown, se debe a sus diferencias con funcionarios de alto rango del gobierno en Washington.
