Foto: AP NUEVA YORK, marzo 24.— Sin poder escuchar personalmente los argumentos que pretendía reiterar el presidente Mahmud Ahmadinejad, el Consejo de Seguridad de la ONU votó por unanimidad, este sábado, una resolución que impone nuevas sanciones a Irán, para presionarle a abandonar su programa de enriquecimiento de uranio.
A pesar de que los embajadores de países como Qatar, Indonesia y Sudáfrica, dejaron claro que se debe conceder a Irán el derecho al uso pacífico de la energía atómica —como reclama el gobierno de Teherán al negar el carácter bélico de su proyecto—, la resolución 1747 incluye sanciones consideradas más duras que las impuestas hace tres meses a esa nación.
Las medidas entrarán en vigor en 60 días si en ese lapso el gobierno iraní no detiene su programa, y dictan a los Estados y a las instituciones financieras internacionales la prohibición de proveer fondos a Irán, salvo si están considerados como «ayuda humanitaria» o «para el desarrollo».
También incluye la congelación de activos financieros a 28 nuevas personas o entidades que el texto identifica como relacionadas con el programa nuclear iraní, a quienes también se imponen restricciones para viajar.
La resolución prohíbe la exportación e importación de armas iraníes, y exige a ese país aclarar las dudas del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) sobre los fines pacíficos de sus programas nucleares, dijo EFE.
El hecho de que la resolución se aprobase bajo el capítulo 41 de la Carta de la ONU, que no contempla la intervención militar, fue destacado por Rusia, en tanto el presidente norteamericano, George W. Bush, calificó la votación, apenas, como una «reprimenda internacional».
El canciller iraní, Manouchehr Mottaki, apuntó al hacer uso de la palabra, que la resolución adoptada es innecesaria, ilegal e injustificable y recordó que esta es la cuarta vez en el último año que el Consejo de Seguridad es forzado por unos pocos de sus miembros permanentes a adoptar una acción contra el programa nuclear con fines pacíficos de su país, informó PL.
Está claro que hay solo dos alternativas para tratar el programa nuclear pacífico de Irán; cooperación e interacción, o confrontación y conflicto, subrayó el Ministro.
Mottaki consideró que la resolución aprobada constituye un castigo contra un país que de acuerdo con la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA) «nunca desvió su programa nuclear».
Según los despachos, había verdadera expectación en la ONU por escuchar al Presidente iraní, pero su gobierno denunció que las visas para viajar a Nueva York le fueron entregadas demasiado tarde por EE.UU.