N.G.: Hace algún tiempo conocí a una muchacha con quien me fui compenetrando y nos enamoramos. Empezamos escondidos, porque soy negro y ella blanca. Todo iba con dificultades, pero bien. Sus padres, desde que se enteraron por un amigo de su familia, han luchado contra nuestro noviazgo. Una vez me pidieron explicaciones y no entendieron mis argumentos. Ella quiere irse conmigo, pero al final son sus padres y no puedo permitírselo. Estoy en una encrucijada. Han sido meses de batalla contra ese racismo. ¿Qué hago ante tanto desprecio?
Evitar comportarte como merecedor de ese desprecio es uno de los comportamientos recomendables. Cuando se escondieron, dieron lugar a la sospecha. Claro que el racismo es reprobable, pero lo que importa no es el desprecio que sus padres o cualquier persona ejerzan contra ti, sino el aprecio que tú seas capaz de tenerte y mostrar ante el mundo.
Me parece bien que fortalezcan su relación de pareja y si es pertinente se independicen en algún momento, pero deben estar atentos: ahora esconderse y huir puede tener connotaciones semejantes.
Eres una persona con mil atributos que te hacen merecedor del afecto de tu novia y posiblemente del de sus padres cuando te conozcan. Es necesaria la interacción personal para darte a conocer. Por otra parte, defender la relación de ustedes requiere de compromiso afectivo. Solo si se aman, podrán superar este momento.