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Nuevas cifras predicen que su población caerá hasta un 25 por ciento para 2070. Autor: Tomada de Twitter Publicado: 17/09/2024 | 11:46 am
ATENAS, septiembre 17.- En un contexto de pueblos vacíos, jóvenes desilusionados y funcionarios buscando soluciones: Grecia se prepara para un colapso demográfico alimentado por la caída en picada en el número de nacimientos, la emigración masiva y las bajas tasas de fertilidad.
Seis años después de que Grecia saliera de sus programas de rescate financiero, marcando el fin oficial de una dolorosa crisis económica, el país se enfrenta ahora a un nuevo tipo de emergencia que podría influir en su estructura social y económica.
Según las proyecciones, en el año 2070 la población griega podría disminuir hasta un 25 por ciento, muy por encima de la media de la Unión Europea, que es de solo un 4 por ciento.
En 2022, el país registró menos de 77 mil nacimientos, la cifra más baja en casi un siglo, mientras que las defunciones casi duplicaron esa cifra, alcanzando los 140 mil fallecimientos. Nada parece indicar que esta tendencia vaya a cambiar pronto.
El colapso demográfico se está convirtiendo literalmente en un reto existencial para nuestro futuro, advirtió el primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis.
El último censo de población, de 2021, mostró un descenso del 3,1 por ciento de la población total en sólo diez años, hasta menos de 10,5 millones de personas.
Esa década se corresponde a grandes rasgos con la crisis económica que atravesó el país, que alimentó el éxodo de cerca de medio millón de griegos, especialmente entre los segmentos jóvenes y con estudios de la población.
Los que se quedaron en el país siguen enfrentándose a una difícil recuperación del mercado laboral, caracterizada por un elevado desempleo y bajos salarios, lo que dificulta aún más la construcción de carreras profesionales y familias estables, según reseña el medio digital Euronews.com.
Consciente de la urgencia del problema, el gobierno griego creó en 2023 el primer ministerio de su historia dedicado específicamente a abordar el reto demográfico.
Dirigido por Sofia Zacharaki, el Ministerio ha introducido una serie de medidas, entre ellas desgravaciones fiscales y mayores subsidios estatales para los recién nacidos, con la esperanza de fomentar mayores tasas de natalidad.
Aunque Zacharaki reconoce que estos esfuerzos por sí solos no resolverán el problema, subraya que representan un paso en la dirección correcta para solucionar lo que ella llama la mayor amenaza a la que se enfrenta Grecia. La tasa de fertilidad de Grecia es actualmente de sólo 1,32 nacimientos por mujer, lo que conduce al lógico envejecimiento de la población.
