La cancillería de Siria denunció este martes a Naciones Unidas el incremento en el suministro internacional de armas a las bandas mercenarias que pretenden el derrocamiento del gobierno mediante asesinatos a civiles y destrucción de la infraestructura, informa PL.
En cartas idénticas al Consejo de Seguridad y al Secretario General de la ONU, Damasco criticó la entrega directa de armamento a integrantes del Frente al Nusra, filial de la red al Qaeda, «quienes difunden el terrorismo, derraman sangre siria y sabotean las propiedades públicas y privadas basados en un pensamiento takfirí extremista».
Advierten las misivas sobre un incremento de la violencia propalada por los grupos terroristas, al igual que una escalada en las posturas y declaraciones de funcionarios estadounidenses, así como nuevas resoluciones dentro de la Unión Europea (UE) y la Liga Árabe para ofrecer más apoyo militar y logístico a las bandas armadas.
Para el Ministerio de Exteriores y Emigrantes, tales procedimientos ocurren en momentos cuando se han logrado avances en el proceso de arreglo político y el gobierno sirio despliega esfuerzos, encaminados a preparar un ambiente propicio para el diálogo nacional entre nacionales, denunció.
Contrastó que existen pruebas de que la infraestructura del país está siendo destruida con armas europeas, cuando paradójicamente sus países dicen imponer un embargo sobre la exportación de armas a Siria.
De igual forma, recordó declaraciones del canciller saudita, Saud Al Faisal, quien confirmó días atrás que Riad continuará ofreciendo armas a los irregulares en esta nación levantina.
La decisión de la UE de vender, suministrar, traficar o exportar «equipos militares no letales» a la llamada oposición es otra nueva prueba sobre su involucramiento en el apoyo a los mercenarios en amplios términos, subraya la cancillería.
Denostó recientes declaraciones del secretario de estado de Estados Unidos, John Kerry, favorables a armar a supuestos «grupos moderados», lo que plantea varias interrogantes sobre la seriedad de Washington en respetar la solución pacífica de la crisis y en la lucha global contra el terrorismo, dijo.
Damasco alertó sobre las peligrosas repercusiones que reviste la insistencia de algunos países árabes y occidentales en seguir apoyando al terrorismo, lo que además pone en entredicho su credibilidad sobre los alegados esfuerzos para apoyar una solución pacífica a la crisis.
Para la sede de la diplomacia, poner fin a la violencia terrorista es un asunto imprescindible para garantizar el éxito del diálogo nacional, por lo cual demandó a la comunidad internacional ejercer presiones contra aquellos países árabes y occidentales que siguen apoyando a los mercenarios aquí, de forma directa o indirecta.