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EL CAIRO, enero 20.— Miles de egipcios se concentraron este viernes en la capitalina Plaza Tahrir para rendir tributo a los casi 850 muertos durante las revueltas populares de hace un año contra Hosni Mubarak, y exigir la renuncia del gobernante Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas (CSFA).
Según PL, los manifestantes también reclamaron el cese de los juicios a civiles en cortes militares, la liberación de los prisioneros políticos, y retomar las demandas de libertad y justicia social.
Convocados por más de 40 partidos, movimientos, coaliciones y asociaciones políticas y sociales, los manifestantes reivindicaron consignas enarboladas contra Mubarak durante los 18 días de levantamiento que llevaron a su renuncia, el 11 de febrero de 2011, apuntó el despacho.
Algunos demandaron también que Mubarak sea ejecutado, reportó XINHUA.
La marcha, titulada Viernes de sueños de los mártires, se inició alrededor del mediodía con un rezo musulmán multitudinario oficiado por el Imán de Tahrir, el jeque Mazhar Shaheen, de la mezquita Omar Makram, situada en un costado de la plaza.
Como parte de los homenajes que se realizarán durante la semana siguiente de luto e ira, los organizadores exhortaron a la ciudadanía a decorar sus casas y negocios con bandas negras en señal de duelo y respeto por las almas de los mártires.
También realizarán un plantón indefinido y una protesta de un millón de hombres el próximo miércoles frente al centro médico donde Mubarak es atendido, dijo XINHUA.
En uno de los puntos del centro de El Cairo, los activistas publicitaron una de sus iniciativas denominadas The Project, consistente en recoger firmas en una bandera gigantesca de Egipto para demandar un Parlamento fuerte con sus debidas competencias y la elección de un presidente civil, reportó EFE.
Además, la campaña pretende que ningún grupo pueda contar con privilegios en la próxima Constitución, una advertencia a los militares que en varias ocasiones han puesto condiciones para la redacción del texto.
Esa gran bandera les será entregada a los representantes del nuevo Parlamento, según los organizadores de la iniciativa, que pretenden huir de radicalismos y encontrar las demandas que identifican y unen a los egipcios.
Una pancarta aclaraba a cualquier confundido que, además de honrar a los 846 egipcios que el Gobierno reconoció como fallecidos por la violencia policial, se oró por los más de 100 caídos a lo largo de 2011 a causa de otras acciones represivas de las autoridades, contó PL.
Madres con vestimentas islámicas de riguroso negro y otros familiares de víctimas llevaron a la plaza de Tahrir grandes fotos de sus seres queridos baleados, apaleados o atropellados por la Policía y el Ejército en el último año, y exigían una condena para los autores.
