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NACIONES UNIDAS, septiembre 9.— Cuba propuso hoy que la mitad de los actuales gastos militares, incluidos los relativos a las armas nucleares, sean destinados al desarrollo económico y social a través de un fondo manejado por Naciones Unidas.
Asimismo llamó a adoptar un plan de acción que permita alcanzar la eliminación total y la prohibición completa de ese tipo de armamento en un plazo no mayor de 15 años.
Ambas iniciativas fueron presentadas este jueves por el representante permanente alterno de Cuba ante la ONU, Rodolfo Benítez, al hablar en una sesión solemne de la Asamblea General por el Día Internacional contra los Ensayos Nucleares.
El diplomático dijo que la sola existencia de esos artefactos constituye una grave amenaza para la paz y seguridad y recordó que hoy hay armas suficientes para aniquilar varias veces la vida sobre la tierra y toda la obra de la civilización.
También consideró urgente avanzar hacia la prohibición y eliminación total de esos instrumentos nucleares.
Con los recursos que hoy se dedican a los armamentos, incluyendo la modernización de las armas nucleares, se podría alimentar a los mil 20 millones de hambrientos existentes en el mundo y garantizar una vivienda adecuada a más de 640 millones de niños que carecen de ella, apuntó.
También precisó que esos gastos tienen lugar cuando las cuatro quintas partes de la humanidad viven en el subdesarrollo y la pobreza, 800 millones de adultos no saben leer y 17 mil niños mueren de hambre cada día.
El desarme nuclear no puede seguir siendo un objetivo continuamente pospuesto y condicionado. Es momento de adoptar acciones concretas e inmediatas, insistió el representante cubano.
La sesión de la Asamblea General de este jueves fue la primera celebración del Día Internacional contra los Ensayos Nucleares, proclamado el año pasado para ser recordado cada 29 de agosto.
