WASHINGTON, agosto 6.— El Senado federal aprobó una enmienda sobre seguridad fronteriza que destina 600 millones de dólares para reforzar la vigilancia militar en el sur de Estados Unidos incluso con aviones no tripulados, reportó PL.
En la cámara alta la iniciativa pasó con apoyo bipartidista, luego de una votación oral y solo tres días antes que el Congreso salga para su largo receso anual de verano (del 9 de agosto al 10 de septiembre).
El proyecto fue presentado por los senadores demócratas Chuck Schumer y Claire McCaskill, y recomienda la incorporación de 1 500 agentes aduaneros al trabajo en las fronteras y el uso de más drones de la Fuerza Aérea.
Antes de ser convertida en ley por el presidente Barack Obama, la propuesta aún debe ser ratificada por la Cámara de Representantes, hemiciclo que el mes pasado ya certificó un fondo de 701 millones de dólares con igual fin.
El plan Schumer-McCaskill separa 176 millones de dólares para contratar a los oficiales fronterizos adicionales y 32 millones para financiar a los aviones sin piloto que localizarán a potenciales inmigrantes ilegales.
La administración Obama desplegó a partir del 1 de este mes 1 200 soldados de la Guardia Nacional para reforzar la seguridad fronteriza. Son tropas altamente entrenadas y custodiarán los límites jurisdiccionales en California, Arizona, New México y Texas, subrayó el general Craig McKinley, comandante de la Guardia Nacional.
Las últimas decisiones políticas de la Casa Blanca han sido tomadas en un contexto nacional de creciente tendencia xenófoba con polémicas legislaciones, una activada en Arizona y otras anunciadas en 20 estados.
Según fuentes extraoficiales, en Estados Unidos están asentados cerca de 16 millones de inmigrantes indocumentados y medios de prensa conservadores alegan que ese hecho cuesta a la economía doméstica 538 000 millones de dólares anuales.