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WASHINGTON.— La economía de Estados Unidos redujo en julio sus puestos de trabajo por séptimo mes consecutivo, algo que, en condiciones normales, ha ocurrido en apenas ocho oportunidades desde que terminó la Segunda Guerra Mundial.
En cualquier otra instancia, aconteció durante una recesión, apuntó Reuters, cuando comentó que si bien la cifra principal del reporte de empleo publicado el viernes, de 51 000 puestos de trabajo perdidos, no fue tan pesimista como muchos en Wall Street esperaban, los datos subyacentes mostraron patrones consistentes con los períodos anteriores de contracción económica.
«Tras las elecciones de noviembre, la Oficina Nacional de Investigación Económica nos dirá (...) lo que ya sabemos, que la economía estadounidense está actualmente en una recesión», dijo Paul Kasriel, director de investigación económica de Northern Trust, en Chicago.
En tanto, Keith Hall, jefe de la Oficina de Estadísticas Laborales de Estados Unidos, indicó que el reporte de empleo por sí solo no bastaba para hablar de recesión, pero reconoció que en los dos últimos períodos de dicha situación económica existieron ocho meses consecutivos de pérdidas de puestos de trabajo.
Además, los datos de empleo arrojaron que el rango de industrias que perdieron puestos de trabajo se está ampliando. Apenas un 41,2 por ciento de las empresas reportaron aumentos en sus nóminas durante julio.
«El mercado laboral puede no estarse reduciendo a un ritmo acelerado, pero el deterioro es lento y estable, consistente con una economía que se encuentra en una recesión lenta», dijo Jennifer Lee, economista de BMO Capital Markets.
La tasa de desempleo, que subió a un 5,7 por ciento en julio desde un 5,5 por ciento anterior, está un punto porcentual por sobre las cifras de hace un año. Además, el número de personas que trabajan media jornada debido a razones económicas aumentó en cerca de 1,4 millones durante el año.
