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La Habana, julio 17._ Ernesto Abreu, presidente de la Junta Patriótica Cubana, afiliada a la organización terrorista Alpha 66, y dueño inscrito de la embarcación Santrina que trasladó ilegalmente al criminal Luis Posada Carriles a EE.UU., acaba de ser detenido en El Paso, Texas, tras negarse a declarar ante un Gran Jurado sobre ese asunto, según AIN.
Según una publicación miamense, Abreu se acogió a la Quinta Enmienda para negarse a contestar a las preguntas del órgano judicial y luego lo condujeron a una cárcel en Chaparral, estado de Nuevo México, comenta hoy el diario Granma.
Hijo del connotado terrorista Ernestino Abreu y cómplice de Posada Carriles desde su presencia en Panamá, Ernesto Abreu aparece en los registros oficiales como presidente de la Fundación para la Protección Ecológica Marina Caribe (FPEMC), dueña postiza del barco camaronero Santrina, en el cual Posada realizó su travesía clandestina.
Abreu fue convocado ante un Gran Jurado de El Paso a finales de mayo, junto al compinche de Posada Carriles, Generoso Bringas. Otros dos personajes del caso Santrina, José Hilario Pepín Pujol, y Rubén López Castro, fueron interrogados por el Gran Jurado el 21 de junio y también invocaron la Quinta Enmienda para no revelar su participación en el complot urdido por Santiago Álvarez, detenido actualmente junto a Osvaldo Mitat, por posesión ilegal de armas.
El barco camaronero Santrina, de 88 pies de eslora y con registro federal, fue utilizado para llevar a Posada a Miami a finales de marzo del 2005; lo cual admitieron hace poco las autoridades judiciales norteamericanas en documentos del FBI presentados por la Fiscalía ante el Tribunal Federal que juzga a Álvarez y a Mitat.
En esa misma embarcación viajaban, además del "promotor" y terrorista miamense Santiago Álvarez y del "capitán" y operativo de la CIA José Hilario "Pepín" Pujol, Rubén López Castro, Gilberto Abascal y Osvaldo Mitat.
Concluye Granma que al Gran Jurado de El Paso le queda interrogar a Álvarez, Mitat, Pujol, López Castro y Abascal, entre otros, si quiere por fin conocer toda la verdad acerca del Caso Santrina, e investigar a los que, desde Washington, dan cobertura a una fauna que aterroriza a Miami desde hace casi cinco décadas.
